La Revolución Bolivariana ha triunfado en la satisfacción de necesidades de nuestro pueblo, y en mejorar las condiciones de vida material de las grandes mayorías. Son evidentes los logros en educación, vivienda, salud y otros. Por la vía de las misiones se ha logrado atender a la mayoría de la gente que anteriormente vivía excluida. La movilidad social ha aumentado así como toda clase de indicadores sociales y de bienestar. Los números, las estadísticas y los reportes de las instituciones internacionales como la FAO, la UNESCO y la OMS así lo demuestran. Por cierto, estas instituciones para nada son chavistas.
Uno de los logros de la Revolución ha sido el aumento de lo que se denomina "La Clase Media". Esta denominación, que es ajena al marxismo, intenta agrupar a aquellos que son profesionales, artesanos, pequeños empresarios y comerciantes, etc, que con su esfuerzo han logrado acceder a bienes y servicios tales como vivienda, vehículos, educación y otros. El tener estos bienes, en la lógica del Capital los hace pequeños propietarios que se ven a sí mismos como Clase Media, pues no se sienten obreros y aspiran a convertirse en ricos.
Pero lo cierto es que solo existen dos grandes clases sociales en el mundo, por un lado los trabajadores, aquellos que viven de su esfuerzo, bien sea físico o intelectual, pero que si no trabajan no comen. Y por el otro están los que no trabajan, los que viven del trabajo de otros, de sus rentas, las cuales no son más que trabajo social acumulado, y que usufructan sin haberlo realizado. Como bien decía Marx hace muchos años atrás, solo existen los explotados y los explotadores.
Por eso es triste la derrota que hemos tenido, hasta el momento, en no haber sabido explicar esto. Es triste ver también, como alguien que alcanza un título académico, ya no se ve como trabajador, sino que se autodefine como "profesional", pequeño empresario, emprendedor, etc, puros eufemismos cuando lo cierto es que, así sea un médico, ingeniero o pequeño comerciante, si no trabaja no come.
En el Capitalismo sólo hay dos formas de convertirse en oligarca: o explotando a los demás, o por la vía de la corrupción y el robo. No hay otra vía de amasar grandes fortunas, milmillonarias en divisas, si no es por esos dos caminos. Pero algunos "profesionales" engañados por la masiva publicidad que les hace creer que son clase media con aspiraciones a seguir ascendiendo, llegan a defender a quienes han robado y saqueado a nuestra nación. Eso explica por qué muchos trabajadores alaban el esfuerzo de Polar y tienen a Lorenzo Mendoza como un héroe de la Venezuela moderna.
Como Revolución y como Partido hemos fracasado en explicar estos temas, debemos reconocerlo, para entonces poder definir nuevas estrategias de formación, de concientización, de develar el discurso de la Derecha, de demostrar que nuestra sociedad se divide en trabajadores y explotadores, y que, quienes se creen clase media le hacen el juego precisamente a quienes traicionan a nuestro país. Es hora de tomar partido, de evidenciar la lucha de clases y de elevar la conciencia de los trabajadores.
