Marea Socialista da a conocer su respaldo la candidatura presidencial de Reinaldo Quijada, de la Unidad Política Popular 89 (UPP 89), en las elecciones anunciadas para el 20 de mayo de 2018. El nombre de Quijada se ubica como alternativa de independencia política de la clase trabajadora y del sufrido pueblo venezolano frente a dos élites de poder que intentan mantenernos atrapados en una polarización política irracional, impuesta desde la mediática oficial y desde los medios comerciales. Esa polarización trata de hacernos ver que no tenemos más remedio que escoger entre dos opciones que han defraudado a la gente:
Por una parte, Nicolás Maduro, representa a la burocracia destructora de la revolución, que ha traicionado la voluntad de cambio del proceso bolivariano y cuyo gobierno también expresa la captura del Estado por sectores mafiosos que vienen desangrando a la República y entregando descaradamente nuestra soberanía. Por otra parte, está el candidato de sectores de la oposición de derecha, Henry Falcón, vinculado a los clásicos intereses del capital y al fracaso del modelo rentista petrolero, evidenciado en los 80’ y 90’. Los intereses económicos que hay detrás de esta derecha opositora tampoco son ajenos a los más recientes actos de rapiña contra el país.
Uno es expresión de la nueva casta que surgió alimentada por el descomunal desfalco a la nación en años recientes y el otro representa a quienes pretenden reimplantar formas de dominación contra las que este pueblo insurgió en el siglo XX y comienzos del XXI. Ambas candidaturas, Maduro y Falcón, significan la continuidad o profundización de la crisis y los padecimientos a los que se encuentra sometida nuestra población.
Varios de los planteamientos de Quijada tienen amplio margen de coincidencia con nuestras propuestas para enfrentar la peor crisis vivida en las últimas décadas y su candidatura se mantiene abierta a la discusión para avanzar hacia mayores acuerdos. Esto último es central para seguir promoviendo el debate necesario y el concurso de quienes pensamos en una salida de emergencia para superar las actuales condiciones de miseria. Otro de los elementos fundamentales que nos hace converger es que dicho candidato se ha deslindado políticamente, de manera clara y decidida, frente al PSUV y a Maduro, con claros límites frente a la derecha tradicional. Venimos trabajando con Quijada en el cruce del programa presentado por la UPP 89 y el Programa de Emergencia elaborado entre Marea Socialista y la Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución (independientemente de las posiciones electorales existentes en el seno de esta plataforma).
Aunque se nos ha impedido, de manera antidemocrática y arbitraria, iniciar nuestra legalización como Marea Socialista, somos una fuerza militante con presencia concreta y conocido posicionamiento público, que ya ha participado en las elecciones de gobernadores en 2017 y en las de alcaldes, en alianza y con la tarjeta de UPP 89, con elevados porcentajes de votación en numerosos municipios. Esto a pesar de los elementos de carácter fraudulento y grosero ventajismo de los eventos electorales marcados por el curso autoritario del actual gobierno y la ANC.
Con nuestra participación no nos hacemos la "vista gorda" ante ese carácter del sistema electoral actual, sino que insistimos en el ejercicio de los derechos que tiene el pueblo elector y cada ciudadano o ciudadana, de elegir y ser elegidos. Además de las maniobras de arquitectura y mecánica electoral (mover centros electorales, apertura del esporádica registro, lapsos insuficientes en los pasos del calendario electoral, convocatorias abruptas y muchas otras irregularidades), y del uso descarado de los recursos del Estado para las campañas, en 2017 hubo graves denuncias de fraude tanto desde sectores de la oposición tradicional (A. Velasquez en Bolívar) como desde factores ubicados en el "Polo Patriótico" (por ejemplo, los casos de Régulo Reyna en Monagas y el comunero Angel Prado en Lara). Esto sumado a la elección de la espuria ANC, con una participación electoral dudosa y sin mecanismos de auditoría. Sin embargo, creemos que los fraudes se combaten peleando, participando.
La abstención, táctica que ya ha sido probada por la derecha reaccionaria en múltiples ocasiones, solo ha provocado desmovilización popular. Pero creemos que en un país donde el voto no es obligatorio, la abstención es un derecho y no puede prohibirse ni reprimirse como lo anuncia el CNE con sus recientes reglamentaciones. Aunque reivindicamos la lucha por garantías democráticas y por nuestros derechos electorales, es ingenuo creer que este gobierno y el CNE lleguen a ofrecerlas. Lo que pretende la táctica abstencionista de los sectores más conservadores de la MUD, es ocultar su derrota y oportunismo político. Ellos son directamente responsables de que este gobierno se mantenga en el poder. Capitularon ante un clamor popular por la realización del referéndum revocatorio y mandaron al matadero a cientos de jóvenes venezolanos sin propuestas ni acompañamiento.
La vieja MUD es corresponsable de la atomización y despolitización de la sociedad venezolana. La participación electoral va más allá de un tema técnico o de garantías. Tiene que ver con la reconstrucción del proyecto nacional, lo cual pasa por generar una nueva oposición desde las entrañas del pueblo, que brinde esperanza y soluciones reales para salir del atolladero. Ante el creciente autoritarismo y represión por parte del gobierno, debemos aprovechar las pocas ventanas democráticas para mantener la denuncia, apostando a la recomposición del tejido social y del movimiento popular, que rompa con la polarización política actual y que permita articularnos en torno a los intereses comunes del pueblo. Por eso participamos desde una perspectiva de lucha, sin crear falsas expectativas milagrosas, pero apostando por la capacidad de respuesta del pueblo.
En la campaña para las presidenciales, Marea Socialista ha resuelto acompañar a Reinaldo Quijada, junto a la UPP 89, con la incorporación de quienes pudieran ser nuestros candidatos y candidatas a concejales en las elecciones municipales. Será una muestra de compromiso, tanto electoral como en la movilización ciudadana, de seguir impulsando una política de lucha para la recuperación de los derechos contenidos en la Constitución, el restablecimiento de la vida democrática y que la crisis provocada por el gobierno, por el poder económico y por los intereses del capital financiero-transnacional, no siga siendo descargada sobre la gente común, sobre los trabajadores, los habitantes de las comunidades populares y pueblos de las distintas regiones del país.
Decimos, como lo hace Reinaldo Quijada, que no es posible salir de la actual crisis con el gobierno de Maduro, que es parte de su causa, ni con la dolarización que ofrece Falcón, ni con más endeudamiento y entrega de la industria petrolera al capital foráneo. Reiteramos que es necesario liberarse del actual gobierno sin caer en las fauces de los otros factores depredadores que quieren seguir sometiendo al pueblo de Venezuela para su propio beneficio.
En estos momentos, enfatizamos la necesidad de hacer frente a la emergencia con la solidaridad humanitaria de otros pueblos de América Latina y el mundo, sin admitir injerencia extranjera y manifestamos la disposición de discutir y aplicar con el pueblo un Programa de Emergencia en favor de las mayorías trabajadoras.
Como parte de ese programa resaltamos la urgencia de suspender o posponer pagos de una Deuda Externa con muchos indicios de ilegitimidad y componentes de corrupción, que se lleva las divisas de la alimentación y las medicinas, de la inversión productiva y de los servicios. Esa Deuda debe ser públicamente auditada con participación ciudadana, para así determinar lo que de pueda o deba pagar, porque es una gran injusticia que se le pague a los corruptos y a sus cómplices por recursos desviados y obras no realizadas, inconclusas o innecesarias que depararon en el enriquecimiento de la burocracia, de empresarios inescrupulosos y de los prestamistas.
Por otra parte, habiendo demostrado un Desfalco y Fuga Delictiva de Capitales descomunal, consumado tanto por funcionarios y militares, como por sectores empresariales y transnacionales; hechos sobre los que hemos presentado investigaciones y recurrido en movilización ante las instituciones, sostenemos que buena parte de los recursos y divisas capturados por el desfalco se pueden recuperar, en aplicación de nuestra Constitución y leyes, así como de convenciones internacionales, actuando contra los corruptos e incautando sus bienes.
Con los recursos de la Deuda y del Desfalco podríamos, con un conjunto de medidas, comenzar a recuperar el trabajo y empleo productivo, especialmente la producción agropecuaria, los servicios básicos y el transporte, las empresas del Estado malversadas por la burocracia y la casta militar, y a recuperar el valor del salario tomando en cuenta el Art 91 de la CRBV, en vista de que las políticas del gobierno y la voracidad especulativa del capital lo han reducido a cero.
Por todo lo anterior, llamamos a un proceso de discusión democrática y de reorganización del movimiento popular donde se tomen en cuenta estas propuestas para unirnos en torno a un proyecto nacional que dé respuesta a la situación y levantar una Nueva Referencia Política Alternativa para superar la nefasta polarización entre los que se corrompieron y traicionaron la revolución, y los que siempre trataron de destruirla en beneficio del capital.
¡Organízate y lucha con Marea Socialista!
Equipo Operativo Nacional de Marea Socialista
REGISTRO EN MAREA SOCIALISTA
Para todos los interesados en registrarse como aspirantes a militantes, simpatizantes, amigos o colaboradores, acá la dejamos el link para que puedan hacerlo: http://www.123formbuilder.com/form-3205854/Registro-Marea-Socialista