Hace poco decía una periodista del canal Globovisión, argumentaba que los venezolanos estaban perdiendo la capacidad de ahorro; en ese momento me surgió la pregunta: ¿de cuales venezolanos habla? Será de aquellos que atesoran dinero y capital en su vida terrenal y nos dicen que ser rico es bueno y hoy en día aumentan considerablemente su caudal de ingresos a través de la especulación en los precios y explotación de sus empleados; entonces si puedo decirte Jessica que bajo su triste concepto humano y falta de espiritualidad ellos están ahorrando mucho dinero. ¿Pero podemos decir que sus actuaciones se corresponden a lo que espera Jesús de nosotros? Recordemos algunos pasajes del nuevo testamento: “Mateo 23: Porque atan cargas pesadas y difíciles de llevar y los ponen sobre los hombros de los hombres (obreros); pero ellos ni con un dedo quieren moverlas (capitalismo). Mateo 6: No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo; donde ni la polilla ni el orín corrompe, y donde ladrones no minan y hurtan. Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá a uno y amara al otro, o estimará a uno y menos preciará al otro. No podéis servir a Dios y las riquezas. De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino del cielo”.
Como ves estimada periodista, todo revolucionario sabe que el más grande revolucionario que ha existido es Jesús, el redentor y el camino a la vida eterna; por lo tanto el ahorro de un autentico revolucionario se basa en que cada uno de nuestros hermanos encuentre en cada uno de nosotros amor y solidaridad, dando un poco de lo que tenemos para mejorar su calidad de vida; ese es la forma de ahorrar de aquellos que sueñan con un verdadero cambio en el mundo, esta es la base de lo que este humilde servidor considera la raíz del nuevo socialismo y la única forma de encontrar la forma de salvar al mundo del consumismo que cada día lo reduce a una expresión materialista donde el hombre se valora en función de su valor monetario y no de su valor espiritual. Hoy muchos venezolanos se encaminan hacia esta forma de ahorrar; créame que cuando usted decida ahorrar de esta manera, sentirá en su corazón que su cuenta en el cielo se incrementa, y es hay donde encontrará el verdadero valor de sus ahorros.
Que Díos la bendiga.
Henry Carrero