Usted puede no gustarle la imagen de Diosdado Cabello, ni como habla, ni como se expresa políticamente. Pero, el hombre da de que hablar a tirios y troyanos. Y eso nadie puede negarlo. Mucho menos ahora cuando se ve que está viviendo con intensidad su sueño. A nadie debe sorprenderle tal hecho. Diosdado, puede ser lo que sea, pero no ha escondido nunca sus deseos de ser el hombre más poderoso de Venezuela. Es un líder autentico. Eso lo he expresado en otros artículos. Pero lo reitero, para aquellos que no lo hayan leído. Este hijo de El Furrial, es lo más original que se conozca, en el mundo político. Si hay otro, yo no lo conozco.
No tiene "pelos en la lengua", cuando tiene que hablar de quien sea. No rehúye el combate, y no le tiene miedo a la calle. Es un hombre de calle, tal vez lo aprendió en las polvorientas calles de su pueblo, cuando corría por ellas, voceando su sueño de ser el más poderoso de los venezolanos y venezolanas. Estudió primaria y secundaria, y un ángel le dijo: "Si quieres ser eso que quieres, ingresa a la Academia Militar". Dicho y hecho. "Mamá, papá, me voy para Caracas. Me haré militar. Sé que es un atajo, pero es válido para cumplir mi sueño. Estaré pendiente de ustedes, y ustedes de mí. Pero les juro, por esta, que me recordarán, no sólo ustedes, sino el pueblo de Venezuela, de América y del mundo".
Un vendedor de sueños, de esos que abundan en el mundo, dijo hay que pensar en grande. No piense que con meterte al ascensor llegarás a la cima. Tienes que trabajar duro, pero con fin en la cabeza. Eso parece haber sido aprendido al pie de la letra por Diosdado Cabello. Hoy día, está en la cresta de la ola. Mandando como lo hacía en la Academia, ante los cadetes. Sorprende la actividad de este líder del PSUV. No sólo ha recorrido al país con su programa televisivo, sino que se pone al frente de cualquiera marcha, camina y camina, como cualquier hijo de Petra.
¿Quién manda en Miraflores? Nadie duda de quién manda: Nicolás Maduro. ¿Quién manda en el país? Cualquiera diría que es quien manda en Miraflores. Pero no es así. Para mí, y para muchos, no hay dudas de que el mandamás es Diosdado Cabello. Y conste que no estoy sembrando incidías donde no las hay. Es evidente, hasta para los gringos, que el hombre fuerte del proceso que dejó Hugo Chávez, como legado, se llama Diosdado Cabello Rondón. Y por eso lo estamos viendo, como muestra sus dientes…