Hay que se bien inocente, pendejo o tonto para creer que los políticos gringos se van a quedar tranquilos al no poder sacar por la vía electoral a Nicolás Maduro y al chavismo todo. Los intentos de magnicidio no son inventos de gobierno bolivariano, prueba de ello es el asesinato de mi comandante Hugo Chávez, aunque muchos crean que su muerte es producto del cáncer, ese es el resultado en realidad y ni hablar de golpes fallidos y exitosos, secuestros y asesinatos de jefes de Estados y de gobierno en América Latina, África y el mundo Árabe.
Los pasados mandatarios gringos, desde George Bush hasta Joe Biden, pasando por Obama, Trump, en fin, las grandes corporaciones y las 200 familias más ricas del mundo no soportan que un autobusero caraqueño sea el presidente de uno de los países más ricos en petróleo, oro, diamantes y agua dulce del planta; pero lo que más calentera da, por no decir: arrechera, es que hayan venezolanos y personajes del submundo político que le hacen lobby y el juego a quienes quieren incendiar el país.
La emblemática María Conira Machado y sus secuaces reunidos en las diferentes organizaciones políticas partidistas no escatiman esfuerzos para apoyar una coalición de fuerza invasora que arremeta contra el palacio de Miraflores y lo dicen abiertamente por esos bodrios llamados "medio digitales nacionales y algunos regionales". Utilizan para ello la contrainformación, después que Padrino López hicieran público la conspiración de asesinar a Maduro, resulta que Vente Venezuela y no sé que partiduchos acusa al gobierno de hostigamiento y persecución. Los traidores a la patria saber que si los agarran en vainas serán procesados y que si están vinculados con los enemigos históricos de Venezuela serán apresados. No es que estamos ante una dictadura peor que la de Marcos Pérez Jiménez, es que desde que el gobierno bolivariano llegó al poder le ha sido imposible trabajar como Dios manda, a pesar de los errores cometidos, los quinta columnas, infiltrados y bichos raros que sean aprovechado de sus puestos de poder afectando al pueblo venezolano y por ende la labor del socialismo.
Si Nicolás Maduro gobierno, es un dictador y si no gobierna es igualmente un dictador, entonces ¿qué hacemos? A los opositores, no quieran a Maduro, a ningunos del gobierno, no respalden el proyecto socialista está bien, pero no se metan a loco, tonto, pendejo o inocente al creer que con un golpe de Estado o matando a Maduro las cosas van mejorar y cuidado con María Conira Machado ella velará por sus intereses económicos y familiares, así como quienes quieren ser gobierno con ella. Los tierrúos, afrodescendientes, aborígenes, los del barrio y eurodescendientes sin plata, no somos de su gusto.
"La inocencia no mata al pueblo pero tampoco lo salva, lo salvará su conciencia..." Alí Primera.
