Al pueblo de Venezuela y los pueblos del mundo.
Frente
a los resultados electorales que dan por ahora negadora la propuesta
presidencial de Reforma de la Constitución queremos manifestar lo
siguiente:
Como
es de público conocimiento la convocatoria al referendo es una muestra
de la vitalidad y profundización de la democracia participativa y
protagónica de la cual nuestro pueblo es el único sujeto. Como nunca
antes el rol del pueblo como depositario de las decisiones
fundamentales de nuestra vida política se ha visto consagrado,
haciendo de la democracia un hecho real y concreto.
Este
papel constituyente del pueblo y la ampliación-profundización de los
derechos económicos, políticos, sociales y culturales estaban
contenidos en la propuesta de reforma constitucional, por medio del
diseño de un estado de transición al socialismo entre cuyos elementos
destacan, el rol preponderante de la economía socialista, la
instauración del poder popular como forma fundamental de ejercicio del
poder y el gobierno del pueblo, la soberanía alimentaria, la
eliminación del latifundio y los monopolios. La ampliación de la
seguridad social a los sectores más desprotegidos, la reducción de la
jornada laboral etc. Dentro de estos aspectos estaba planteada la
posibilidad de reelegir cuantas veces el pueblo quiera al Comandante
Chávez.
Esta
posibilidad cierta de constitucionalmente avanzar en la construcción
del socialismo bolivariano desde el inicio se vio confrontada por las
fuerzas más oscuras de la contrarrevolución interna y yanqui, que no
dudaron en movilizar recursos económicos y humanos para desatar las mas
macabra campaña de distorsión y confusión de la reforma constitucional.
A la campaña de terror y manipulación mediática le sumaron la
movilización de sus caballitos de batalla como son los estudiantes
pequeñoburgueses hijos de lo peor de la cultura de consumo y el
individualismo capitalistas. El enemigo tiene claro que la continuidad
de la dominación imperial, en el continente se juega en Venezuela sus
grandes batallas.
Por
lo mismo no dudaron en incorporar a sus filas en calidad de aliados
circunstanciales o quizás hasta estratégicos a factores reformistas
traidores del proceso como son PODEMOS y el ex-Gral. Baduel. Quienes
fueron la voz cantante de la contrarrevolución durante toda la campaña
y los principales satanizadores de la propuesta presidencial.
Pero
por otro lado también desde dentro del proceso hubo sectores y
dirigentes con responsabilidades importantes que conspiraron contra la
iniciativa presidencial. Nos referimos a las decenas de alcaldes,
concejales, diputados y muchos gobernadores que simplemente se montaron
las bolas al hombro y sabotearon la campaña electoral dejando
prácticamente sólo, en ella, al compañero Presidente y al pueblo que
con las uñas tuvo que parir sus recursos y montar su campaña. Estos
dentro de la nueva coyuntura y escenario serán desmantelados por el
avance duro de compañeros y compañeras que hoy amanecemos con el
espíritu combativo en niveles más altos que los de ayer,
Este
sabotaje interno propio de los sectores burócratas y corruptos que
disfrazados de revolucionarios usan las instituciones y sus puestos en
el gobierno para beneficio propio y de grupo al tiempo que sabotean la
implementación de la políticas revolucionarias sirvió de alimento a la
frustración, desesperanza y apatía de cientos de miles de compatriotas
que no ven respuestas en ese “estado” y en esos funcionarios que se
hacen llamar “gobierno” y en los cuales no se sienten para nada
reflejados.
Por
ello y de manera autocritica queremos resaltar un problema fundamental
que tiene la revolución y ese es problema de la conciencia. Con todos
los avances que hemos tenido en estos años de lucha, todavía como
pueblo y como clases dominadas en lucha por la liberación nos movemos
en el terreno de la emoción, de la adhesión circunstancial al liderazgo
presidencial, de la poca profundización en las propuestas del
socialismo bolivariano, de la militancia temporal y aérea, de la
dispersión y atomización de nuestras fuerzas y luchas. No hemos roto
aún con los criterios economicistas, del “cuanto hay por eso”. De la
falta de organicidad e implementación de los métodos correctos de
trabajo revolucionario. Todos estos y muchos otros elementos nos
llevaron a no dimensionar el carácter estratégico de la reforma y el
por qué estábamos obligados a ganarla. Preferimos traspasar esa
responsabilidad, nuestra, al Presidente y confiados en la victoria por
“arte de la magia del Comandante”, asumimos el triunfalismo y el exceso
de confianza como práctica política, olvidando que en política nada es
ciento por ciento seguro. Quizás ese fue uno de nuestros grandes
errores, pero también del Comando Zamora que como comando prácticamente
no funciono, sino un cogollito de los sesudos y operadores políticos de
siempre, que esta vez se estrellaron contra la realidad dura y cruel,
que los lideres no pueden denominarse revolucionarios mientras se esta
distanciado del barrio, del cerro y del campo rural.
Ahora
le toca al pueblo, nos toca asumir autocríticamente esta derrota
electoral, nos toca hacer un profundo balance de nuestras fuerzas, del
enemigo, de los traidores y de los que conspiraron desde dentro. Nos
toca traspasar los márgenes de la camisa de fuerza que es la
institucionalidad y su cuerda de burócratas y corruptos, para
implementar el programa revolucionario tenemos que prescindir de ellos.
Nos toca cobrar y cobrar duro a alcaldes, diputados y gobernadores
traidores, nos toca desatar desde abajo el verdadero poder
constituyente, la acción transformadora del pueblo, construir con o sin
apoyo del estado y al lado del comandante Chávez la nueva
institucionalidad revolucionaria, profundizar el desarrollo de la
conciencia, la formación y los valores. Darle un parao a la
desesperanza y a la frustración. Las respuestas y soluciones a las
necesidades que tenemos como pueblo tenemos que darlas nosotros mismos,
“el pueblo salva al pueblo”. La Liberación Nacional y el Socialismo
sigue siendo la tarea revolucionaria y popular de carácter prioritario.
Hagamos un alto en el camino para ver el frondoso bosque de la montaña,
para abrazarnos, para organizar nuestros hombres, municiones,
provisiones y trazar los nuevos caminos por los cuales transite la
revolución bolivariana esta vez en manos de sus legítimos dueños, el
pueblo armado de conciencia y organización.
A
todos los compañeros y compañeras de lucha, a los confundidos, a los
que se abstuvieron de esta pelea, los convocamos a no dejar que la
tristeza, la rabia y el miedo los paralice. Ahora es cuando recién
empieza la pelea, ahora es cuando recién las orejas de lo nuevo se
asoman, ahora es cuando se clarifican y depuran las aguas, ahora es
cuando el cantar del gallo anuncia al sol de la victoria clareando en
Santa Inés. Ahora es cuando como un solo puño firme y con la mirada
intacta debemos golpear a los enemigos de la contrarrevolución,
redoblando el trabajo, la mística, incrementar los niveles de
organización y conciencia. Realmente asumir la corresponsabilidad
historica en el accionar del protagonismo participativo. Para con moral
combatiente y energía renovados decir a una sola voz: Nacimos para
vencer y no para ser vencidos. Ordene compañero Comandante Chávez