A propósito del 23 de enero de 1958

Según los protagonistas – comunistas - de la gesta del 23 de enero de 1958; el pueblo
venezolano demostró durante la parte final de la década de los cincuenta, un antiimperialismo bien acentuado, el cual no fue aprovechado por el partido comunista de Venezuela; debido a la falta de ambición de poder, del partido Comunista.

Recuerdan, los protagonistas citados, que ese pueblo Venezolano fue el que no permitió la entrada, al Panteón Nacional, del Vicepresidente de Estados Unidos: Richard Nixon, y también saboteo la reunión convocada por los Estados Unidos y la Organización de Estados Americanos ( OEA ), en Caracas para, para propiciar una sanción al presidente de Guatemala Sr. Jacobo Arvens.

La actitud antiimperialista del pueblo caraqueño fue tan decidida, durante la pretendida gira del vicepresidente estadounidense, que llego al punto de propiciarle una lluvia de saliva, provocando todos estos acontecimientos; el hecho que el gobierno de los estados unidos amenazara con la posibilidad que la flota imperial invadiría a Venezuela para “rescatar” a su vicepresidente.

También relata, el ex guerrillero Douglas Bravo: que durante las horas de la noche y la madrugada entre el 22 y el 23 de enero; un joven oficial militar, en el palacio de Miraflores emplazaba a oficiales generales, para que entregasen sus puestos de mando y se retirasen, ya que esa revolución la cual ya estaba en marcha, era un movimiento libertario de jóvenes civiles y militares.

Opinan, estos protagonistas del 23 de enero que el Frente Popular, y principalmente el partido comunista, perdieron la oportunidad de nombrar una junta patriótica de gobierno, presidida por el periodista Fabricio Ojeda.

En cambio la Junta de gobierno impuesta fue conformada por oligarcas y favoreció precisamente a ese estamento, que nada había arriesgado, para derrotar la Tiranía.

Destacan los protagonistas, que el mismo 23 de enero, cuando los conjurados de la junta patriótica, al tomar la televisora Nacional, anunciaron que los saqueadores que estaban en la calle eran enemigos de la revolución – según ellos – esta declaración fue recibida como una traición para el pueblo, quien había sido el protagonista en todas las actividades contra la dictadura, las cuales fueron llevadas a cobo durante todo ese mes de enero.

La falta de decisión de parte de los comunistas al no capitalizar la ascendencia que había logrado en el pueblo venezolano: allano el camino hacia la consolidación de la influencia ya histórica de los estados unidos en las cúpulas oligarcas, la cual fue materializada con el nefasto y triste recordado pacto de punto fijo entre los tres partidos políticos de derecha, que a la postre dirigieron al país hacia el desastre durante mas de 40 años.

Lo que esta ocurriendo actualmente en las regiones del país, las cuales han recibido mas de la revolución, da a entender que el veneno – consumismo, egoísmo, individualismo, competencia, codicia y otros anti-valores - que inoculo el imperialismo en el pueblo venezolano, ha surtido un gran efecto, y por esta razón, y para no defraudar a ese pueblo, los dirigentes de la revolución, deben asumir esa actividad – de dirigente - que han escogido, como un apostolado y no una forma de vida, de nuevo rico, que solo busca satisfacer sus propios deseos e intereses.


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William Castillo


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