Le voy a tomar a José Vicente Rangel, el testigo en una carrera de largo aliento como lo es la construcción de la revolución bolivariana, a propósito de su artículo “Algo está pasando”, publicado en Últimas Noticias y Aporrea, agregándole el Algo Pasó y continúa pasando. Se trata no de buscar culpables que evidentemente los hay por comisión u omisión, sino al contrario de lo que podría pensarse, la cuestión está en que hay algo más allá de ello.
Mucho se podría especular aunque realmente considero que la cosa no está para remontar sino para avanzar, me refiero a lo que se pudo hacer y no se hizo, a lo que no se corrigió, evidenciado por el hecho casi cierto que al presidente no le cuentan el cuento completo de las cosas que seguro estamos siempre preguntará en su afán de mejorar y hacer posible que las cosas se hagan lo mejor posible, miren, esta oportunidad histórica sobre la que cabalgamos no se presentará más nunca, su pérdida sería un tsunami de consecuencias incalculables para el poder popular y la libertad del pueblo, es por ello, que debemos avanzar en la detección de las debilidades que las hay y que deben ser corregidas bajo un remezón bajo el argumento válido y urgente “que caiga quien caiga”, culpables los hay, no obstante, esta es una demostración clásica de dejarle a los demás la solución de los problemas, o no es el caso que ministros dejan que el presidente resuelva todo en Consejo de Ministros.
No estoy seguro si la nueva instancia administrativa denominada Consejo de Gobierno está dirigida a estas cosas, lo cierto es que el presidente debe reunirse con quienes en verdad pueden aportar cosas nuevas, se me ocurre por ejemplo al Gral Muller Rojas a José Vicente Rangel, Luis Fernando Soto Rojas, Bernardo Alvarez, Roy Chaderton, Profesor Néstor Rivero, Carlos Lanz, entre muchos otros, es decir a quienes no estén en funciones internas de gobierno por mucha confianza que exista con el presidente, el circulo de poder debe ser sacudido de tal manera que al presidente se le ofrezcan otros horizontes más allá de la burocracia hecha rémora.
El pueblo en su sabiduría tiene tiempo oliendo el azufre criollo, a nivel de batallones y ahora patrullas se conversa sobre estas cosas y casi generalizado decir, al presidente pareciera que lo dejan solo por decir lo menos, la especulación se apodera a veces de nuestra gente, porque sencillamente no hay canales no solo para participar, sino lo que es aún más grave para corregir o desmentir cosas que se sienten palpables por ese olor nauseabundo, lo que ocurre en la administración pública centralizada y descentralizada es de terror, pululan los escuálidos en cargos de decisión, en ministerios nuevos como el de alimentación y de la mujer con todo respeto a la ministra, pasan cosas increíbles, la competencia entre directores(as) es inconcebible, madres del barrio, ministerio de salud se creó una instancia que fue liquidada por el excelso y revolucionario ministro Gilberto Rodriguez Ochoa (FIMA) y se creó otro, donde los millonarios contratos van y vienen, solo hagan una revisión de la cantidad de equipos médicos que no han sido instalados y que reposan en hospitales y otros en almacenes y cuya instalación solo la conocen los cubanos, no es especulación y procedan y se verá la costura.
Hemos escrito en varias oportunidades sobre la administración pública y nadie absolutamente nadie tan siquiera pregunta quien es ese que escribió eso, de donde obtiene la fuente, incluso dejé mi correo para contacto, o es que en la administración pública nadie lee aporrea y menos le hace caso alguno a los planteamientos de un humilde servidor.
En dos oportunidades he aprovechado artículos de opinión de José Vicente para creo yo, tratar de impactar a alguien que algún día tomará la batuta, no quiero que se mencione mi nombre para nada, lo que si deseo es que alguien tome ese testigo esperando que no sea el propio presidente a quien le recomiendo que se meta en la pagina de aporrea y baraje o tome el pulso de lo que mucha gente honesta está pensando en voz alta.
rafaelfebles@yahoo.com
