La V Internacional Socialista es la propuesta del momento y coloca al Presidente Chávez en el centro del debate internacional. Estoy dentro de este proceso y desde ahí me permito opinar.
La liberación será mundial, pero se realiza en espacios concretos. El programa, en consecuencia, es mundial, pero enraizado localmente. Se define y se cumple en la lucha casa por casa que se debe librar en el mundo entero. No en los gabinetes. Si no, la Internacional perderá base de sustentación.
Una concisa mirada al panorama mundial define el programa como una lucha por la liberación de la humanidad y de la naturaleza.
En la próxima cumbre de Copenhague los países del Norte no desean un acuerdo jurídicamente vinculante; quieren apartarse del Protocolo de Kyoto e ir hacia un nuevo tratado; rechazan su responsabilidad histórica en la destrucción del planeta y su compromiso para limitar emisiones de gases invernadero en los niveles urgentemente necesarios; su compromiso de transferir financiamiento y tecnologías para que los países del Sur puedan adaptarse y superar el hambre mientras combaten el cambio climático.
De la misma manera rechazan en la ONU una resolución para legitimar los Derechos de la Madre Tierra.
Sabotearon en Roma la Cumbre sobre Seguridad Alimentaria negándose a aceptar el 2025 como fecha límite para erradicar el hambre y facilitar el financiamiento correspondiente. Ratificaron su enfrentamiento a la agricultura campesina ecológicamente sustentable.
En cambio continúa la política guerrerista encabezada por EEUU organizando bases militares, como las de Colombia. El camino es la guerra para superar la crisis del capitalismo descargando sus efectos sobre los pueblos y la naturaleza.
En este panorama, es conveniente buscar la fuente de inspiración en la I Internacional, organizada por Marx. Él señaló el camino para la unidad de la diversidad del movimiento revolucionario: la práctica común y la reflexión sobre esa práctica común. Luego, el problema siempre fue la liberación de la humanidad, como fue expresado en la letra de la internacional: el género humano es La Internacional, a través de la liberación de las famélicas legiones.
Este consejo de Marx es imprescindible: La revolución… no puede sacar su poesía del pasado, sino solamente del porvenir.
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