El nuevo ministro de comercio de la República Bolivariana, el camarada Richard Canán, al fin se nos muestra públicamente, y no podía ser de otra manera que trayéndole buenas noticias a la burguesía comercial: aumento de precios, nada más y nada menos, que donde le duele más al pueblo revolucionario: la canasta básica. El pollo, azúcar, arroz, aumentan en un 30%; mientras el salario mínimo lo hacía en un 25%, y todavía una cadena de aumentos en estos rubros esenciales en la dieta de nuestro pueblo, programados a lo largo del año, “los próximos productos a revisar o aumentar de precio serían la carne de res, costilla y chuleta de cerdo, previsto para este mes. En abril subirían los aceites y la pasta, en mayo los lácteos y en julio le tocaría a la harina precocida de maíz…” (Últimas Noticias, 10-03-2010). Lo interesante de lo expresado por el ministro Canán, es sus motivaciones para tales anuncios orientados a resaltar las bondades de un gobierno que es responsable y cuidadoso que “nuestros” empresarios no pierdan y se desmotiven a seguir invirtiendo en la producción de estos rubros alimenticios. Tanta candidez del ministro nos asombra, no menciona el sr. ministro de comercio de un gobierno que se auto define como obrerista y de orientación socialista, que los beneficiarios de dichos aumentos de precios, han acudido al cochino artilugio de presionarlo, mediante el mecanismo de la creada escasez de esos productos, para lograr quebrarle el espinazo y someterlo a sus ansias de incrementar sus tasas de ganancias, logrando así su objetivo. Justificar la medida de incremento de precios de los productos de la dieta básica, en el sin sentido de responsabilidad del Gobierno Revolucionario es no hablarle claro, al pueblo venezolano, de la derrota que les causa la burguesía comercial en esta batalla acrecentada de lucha de clases que confrontamos en este período de transición entre sistemas en pugna, el capitalista que se fortalece con estas medidas de incremento de precios, y el socialista que se debilita.
Cada incremento de precios, en cualquier rubro, es un punto más a favor del capital en desmedro del trabajo, un punto más a favor del capitalismo en desmedro del socialismo, esa es la paradoja de estos anuncios que desdibujan el sentido revolucionario del Gobierno, haciéndolo ver como responsable para la burguesía apátrida que lucha incansablemente por su caída, pero irresponsable ante un pueblo que da su vida por la defensa de ese Gobierno, ante los ataques furibundos de esa burguesía apátrida y sus agentes políticos (AD, Copei y sus derivados: Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo, Causa R, Podemos, Mas, Consejos Universitarios: UCV, ULA, LUZ, UC, UDO, Asociaciones de Profesores, FCU, Fedecámaras, CTV, Iglesia Católica, CNP, entre otros y otras organizaciones políticas).
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