Cualquiera podría creer que al imperio le falta creatividad, basta con reflexionar acerca de las recetas aplicadas en diferentes latitudes, en distintos momentos, desde los centros de poder mundial, en su lucha por apropiarse de las reservas energéticas del planeta. Pero lo curioso es que esa aparente falta de imaginación, también se reproduce en eso que llaman “La izquierda oficial”. Así vemos como el imperio ayer invadió a Iraq y Afganistán, con los mismos pretextos que hoy esgrimen para invadir Libia, y la izquierda oficial sale con los mismos argumentos, con la misma ceguera, a hacerle coro a los Estados Unidos, Israel, Colombia y demás cipayos del imperio, adalides de los derechos humanos, denunciando armas de destrucción masivas, masacres, etc. ¡Dios nos libre de semejante hipocresía!
Recordamos como en el pasado reciente, con la invasión de Irak, el imperio inicio su guerra de cuarta generación, despotrincando contra Hussein, su antiguo cachorro, que probó sus habilidades en la guerra contra Irán, en las masacres contra los Chiitas y los kurdos, utilizando las armas químicas dadas por occidente. En esa etapa nuestros eruditos intelectuales también hicieron comparsa de manera irreflexiva, toda vez que resultaba evidente, incluso para el papa, non santo por cierto, las inmorales intenciones que se escondían tras la lucha por la libertad y la democracia.
En nuestra región pareciera que aprendimos los formatos, agendas y recetas del imperio, será porque las vivimos en carne propia, como lo evidencia la posición visionaria de los gobiernos que hacen parte del ALBA, quienes desenmascaran las verdaderas intenciones de las transnacionales imperiales contra Libia. Quienes por lo visto no aprenden son nuestros camaradas europeos, y sus replicas en Venezuela, pues sin pensarlo dos veces, sin apelar a profundos análisis geoestratégicos, repiten y amplifican las matrices de opinión generadas desde los centros mediáticos imperiales propios de la vigente guerra de cuarta generación. ¿Cómo se comportaran cuando, con seguridad, venga en serio el imperio por nuestras reservas energéticas? ! Ilumínalos señor ¡
