Si el día
de hoy se celebraran unas elecciones en Libia seguramente Muammar Al
Gaddafi seria elegido como Presidente de ese país. Esta ha sido la
opinión de muchos analistas y periodistas extranjeros que han estado
presentes en Libia bajo la agresión de la OTAN. Muchos están de acuerdo
de que la popularidad de Gaddafi ha crecido como nunca antes.
El líder de
la Revolución Verde cuya imagen se encontraba completamente desgastada
antes de la arremetida imperial, debido a los profundos errores políticos
por su gobierno que habían conducido a ese país al nefasto proceso
de apertura económica y política a los capitales europeos y estadounidense:
“el abrazo mortal con Occidente”, hoy se encuentra ampliamente fortalecida
y blindada con el apoyo de los sectores populares de Libia. Varios movimientos
de izquierdas, la mayoría de los lideres tribales del país, entre
otras personalidades intelectuales, académicas y frentes patrióticos
en general, quienes en un momento habían asumido posiciones muy críticas
y contrarias al gobierno de Muammar Al Gaddafi indiscutiblemente hoy
se han unido en torno al líder libio luego de iniciada la agresión
de la OTAN. Esta realidad se aprecia a diario en los medios públicos
de la televisión, radio y prensa escrita de ese país en las manifestaciones
públicas que hacen los representantes tribales e intelectuales libios
de apoyo al gobierno libio y a su líder, cuya autoridad moral la consideran
incuestionable.
Sólo esto
explica la razón del Por qué los Estados Unidos de America y sus aliados
reunidos en torno a la OTAN se niegan en aplicar la Hoja de Ruta presentada
por la Unión Africana que incluye el inmediato Alto al Fuego y la convocatoria
inmediata a elecciones en ese país norafricano.
La
próxima arremetida contra el pueblo libio
se hará nuevamente en la ONU
Como todos
los años, antes de la apertura de la nueva sesión de la Asamblea General
de la ONU, cada Estado miembro de la organización deben hacer llegar
una Carta al Secretario General y al Presidente de la Asamblea General
(cuya presidencia hoy reposa en manos de Qatar) informando sobre los
nombres de sus representantes para ese nuevo periodo de sesiones. Las
cartas son examinadas por una Comisión de Verificación de Poderes
que es elegida al inicio de la sesión (a partir del 13 de septiembre
de 2011). Se espera que esa Comisión objete las credenciales de la
delegación escogida por el legítimo gobierno libio y se lleve el caso
a votación en la Asamblea General de la ONU, cuestión que no es favorable
para el gobierno libio.
Antecedentes
En el año
2009 la Asamblea General de las Naciones Unidas, a solicitud de los
miembros de la Unión Africana, sometió a votación la carta de acreditación
de los miembros de Madagascar (luego del Golpe de Estado acaecido en
ese país). En esa ocasión la Asamblea General decidió no permitirle
al gobierno golpista ocupar el puesto de su país.
¡Guerra
avisada!
Según informaciones
de algunas fuentes serias dentro de Naciones Unidas, se espera que varios
de los 9 miembros que componen la Comisión de Verificación de Poderes,
manipulados por las potencias agresoras a Libia, objete la delegación
designada por el Gobierno de Muammar Al Gaddafi y llame a votación
en el seno de la Asamblea General de la ONU para de esta forma desconocer
al legítimo gobierno libio dentro de este organismo internacional,
y de ser posible reconocer a los miembros del Consejo Nacional de Transición
libio (CTN).
Es conocido
también que el gobierno de los Estados Unidos y varios gobiernos aliados
han reconocido de forma unilateral de los miembros del CNT como los
“nuevos representantes en sus respectivos países del Estado libio”.
De igual forma han adelantado gestiones para tales fines dentro de las
Naciones Unidas.
Se está
sembrando un precedente peligroso
Los Estados
Unidos de America han obstaculizado la participación de la delegación
del Gobierno libio en los trabajos y reuniones de preparación para
la nueva sesión de la Organización de las Naciones Unidas, negando
las visas y la logística necesaria de los representantes libios, violentando
así la Carta de la ONU de 1945, en su articulo 2 y 105; de la Convención
sobre Privilegios y las Inmunidades de las Naciones Unidas de 1946 y
el Acuerdo firmado entre la Organización de las Naciones Unidas y los
Estados Unidos de America por ser la sede principal de la organización,
de 1947 (Articulo IV, Sección 11 y 14, y Articulo V, Sección 15).
Ahora bien, de producirse una nueva Resolución por parte de la Asamblea General de la ONU que desconozca al legitimo Gobierno de Gaddafi y reconozca en su lugar al CTN, se estaría sentando un nuevo precedente que no sólo violenta la Carta de las Naciones Unidas (en su preámbulo, artículo primero y segundo), desconociendo la soberanía del pueblo libio, sino que, además, se estaría permitiendo a la instalación de un Gobierno supranacional que reconocería o desconocería a los gobiernos legítimos según los designios del Imperialismo.
basemtch@gmail.com(*) Basem Tajeldine es miembro del Centro de Saberes Africanos