El objetivo 5 (defensa de la vida) del plan 2013-2019 ha causado un buen impacto en los ambientalistas. Ese objetivo y el discurso del Presidente en Copenhague 2009 (que privilegió la vida sobre la geopolítica convirtiendo a Chávez en líder ecologista) son una guía para Río+20.
La humanidad depende de que hacia fines del siglo XXI la temperatura no exceda 2 °C con respecto a la era preindustrial. Si la tendencia de acumulación de CO2 en la atmósfera se mantiene, para 2050 ella tendrá 530 ppm de CO2, habrá un incremento de la temperatura de 3,5 °C y un dramático desastre para la humanidad.
Los patrones de consumo y producción creados en el Norte son causa esencial de la emisión de CO2. Erradicarlos significa independencia y ruptura con la dominación del Norte, pues ellos imponen la comercialización de la naturaleza, los recursos genéticos y los conocimientos de los pueblos indígenas, oculta tras la llamada "economía verde", que abre otra frontera para la acumulación de capital y más CO2.
En las emisiones acumuladas entre 1900-2010, 72% fue responsabilidad del Norte y 28% del Sur, pues el Norte también ha colonizado la atmósfera. Mientras transformamos los patrones de consumo y producción, haremos emisiones de CO2. Por tanto, para que el Sur pueda erradicar la pobreza, es necesario descolonizar la atmósfera; pero la colonización se incrementaría con la economía verde del Norte.
Una de nuestras opciones es la captura de carbono, producir oxígeno y agua mediante la masiva reforestación, sobre todo en las cuencas de los ríos y trabajar por la autonomía financiera, fiscal y monetaria del Sur.
El Norte provoca el desastre para hacer negocios. Tiene tecnologías para capturar carbono, capitales y sabe que los países del Sur serán los más afectados. Por eso, se oponen a la transferencia de recursos financieros y de tecnología afirmando su política de destruir a los Estados soberanos y crear una periferia empobrecida, caótica, sometida al capital para vendernos tecnología e imponernos condiciones a cambio de créditos. Es la continuación por otros medios de la guerra contra la humanidad y la naturaleza. Río+20 es un teatro de operaciones bélicas de baja intensidad, no una negociación convencional. La vida y la soberanía no son negociables.
julio.escalona99@yahoo.com