Esperanza Aguirre, Rato, Acebes, Güemes... ¿Quién dice que no hay trabajo?
Los políticos españoles, del Partido Popular y del PSOE, utilizan el servicio público para «calentarse» el futuro empacho (despacho) privado para llenar bien los bolsillos con el dinero de todos los ciudadanos. El titulo de esta nota va por ahí. De dirigir la sanidad pública madrileña, por ejemplo Güemes, pasa a una empresa privada que administrará, mira tú qué casualidad, ex centros públicos de la sanidad madrileña que él mismo privatizó. Lo de Rato es vergonzoso (para todos menos para él). Además de mediocre no tiene vergüenza, Telefónica parece haberse convertido en la guarida de cuanto rufián anda suelto, que no me vengan a vender nada. Acebes, exministro de Interior con Aznar acaba de declarar en la Audiencia Nacional española por el desfalco y quiebra de Bankia, entidad de la que formaba parte directiva y de la que cobró en 2011, por cinco meses y cuatro días en el puesto, un total de 163.000 euros. Es decir, más de 1.000 euros diarios. A la pregunta del fiscal sobre las circunstancias (méritos) que permitieron su ingreso en BFA (filial de Bankia), que le reportó tan estupendas ganancias, contestó: «Me propuso el presidente (Rodrigo Rato)». Esos eran todos sus méritos.
A esta larga lista de «linces» ibéricos añadir la reciente contratación de la inefable Esperanza Aguirre para una empresa catalana dedicada a la «caza de talentos», que en el fondo todos sabemos que de lo que se trata la contratación es de una conseguidora de contactos para hacer negocio con el dinero de todos los ciudadanos.
Por eso el rey y su amante Corinna, Urdangarín y toda la «realeza» que los acompaña pone el grito en el cielo cuando se ven presionados: «España es cañí (así)» dicen. ¿Hasta cuándo aguantará la gente a todos estos conseguidores?
xurxom@kiaxo.com
Esta nota ha sido leída aproximadamente 1707 veces.