Simple espejismo de la oposición insinuar que el patrón del golpe en Egipto con represión inhumana y máxima crueldad o las revueltas de Brasil puedan ser repetidas a Venezuela.
Siguen desconociendo a Maduro, pero, él, permanece siendo Presidente. Declaran ilegitimidad, pero, el pueblo en la calle le da respaldo en tanto elegido por la mayoría.
Dicen que el perdedor es simpático, no así, Maduro, pero, él, es Presidente.
Hacen calistenia diplomática en círculos de la ultraderecha; se unen a corrillos de golpistas cuya pompa promueve arto rechazo popular; inclusive, parte de la comunidad de quienes los apoyan, mientras, que el Presidente electo, asiste a reunión Cumbre adonde van sus iguales y forma parte de un reconocido grupo de Gobernantes que toman acuerdos para impulsar una organización mundial, que dentro de poco, dará mucho que hablar, y, sin duda, producir resultados en materia de gas, tanto como la OPEP en materia de petróleo.
En las materias de política, internacional y calle los resultados del gobierno son evidentes y aceptados por el publico a quien se dirige; al contario, ellos con su fárrago impenitente sobre la ilegitimidad, crean cansancio a sus asociados y pueblo en general.
A diferencia de Brasil y Egipto adonde el problema es fundamentalmente de origen en lo asistencial, Venezuela, cuenta con programas adonde el resultado en educación, sobre todo, de nivel superior e igual en los niveles básicos y primarias son reconocidos.
En los países referidos quienes promueven la protesta movilizan a sus respectivas sociedades con motivaciones de fondo político y social. Allí el pueblo protesta, a gobernantes y la forma como se actúa el sistema de parlamentario y la dinámica de los partidos políticos; les exigen que se hagan cargo de pobreza, por constante baja en la inversión social, expresada en deterioro de la salud y la educación, mas un caótico crecimiento urbano sin los servicios garantizados, mas otras formas de desamparo social. Y, en Egipto agréguese las postrimerías de una guerra civil por la ultima matanza de ciudadanos.
Actora importante en Brasil y Egipto, la juventud emergente, no quiere entregarle su presente y futuro a las grandes empresas petroleras, ni a la FIFA, ni a los congresistas ni al golpismo militar.
En este marco pervertido surgen grupos ajenos a los móviles de la convocatoria e infiltran buscando desvirtuar y manipular los reclamos en función de sus oscuros y mezquinos intereses elitistas conservadores también están presentes la eternas ONG cuyo fin es desestabilizar.
Se producen actos vandálicos, saqueos, y se prodce la represión contra los manifestantes y desde la derecha le meten pólvora a la candela.
En este clima la derecha busca la ira colectiva y transforma los reclamos en movilizaciones antigubernamentales, anti PT, en Brasil y antigolpistas en Egipto.
Sueñan con dar cuerpo un nuevo formato al “golpe ciudadano”, que, obviamente luego encabezarían sus jefes de guante blanco y mano derecha. Muy parecido a la utopía de la MUD caraqueña según declara la Diputada Machado.
En síntesis que su búsqueda de comparaciones es todo una fantasía insostenible. Felizmente, aquí, por ahora, solo tiene futuro aquello que se resuelva por la vía electoral.