El presidente Ruso, Vladimir Putin, en su Campania Electoral, prometió devolver la grandeza, a la madre patria. En donde siempre, sin vacilación, había protegidos, defendidos y apoyados a los suyos sin vacilación alguna. Ninguna potencia o nación, se atrevía a violentar a los hijos, de la Madre Patria, sean interinos ciudadanos, o foráneos camaradas. El veto de la Unión Soviético, antes la eficaz, Naciones Unidas, de aquel entonces, era respetada, mejor aún, postrada y temida.
Existía un equilibrio global, ya que contábamos con dos potencias. Las naciones, no se agredían o confrontaban, ya que acataban inexcusablemente las leyes y tratados internacionales. Nadie podía implementar a la fuerza su ideología, a otras naciones. La ONU, aun conservaba un pequeño fragmento de dignidad y moral para juzgar, ya que poseíamos, dos súper-jueces, quienes resguardaban condicionalmente a sus aliados.
Vladimir Putin, reconoció que el roll de la madre patria, dejo de coexistir. Cuando su patria, por contrariedades económicos, fueron cediendo obligatoriamente y bajo cuantiosas presiones hacia los capitalistas occidentales e imperiales. No tuvieron otra opción, que abandonar a sus camaradas foráneos, dejándolos desolados, solos e indefensos, antes la insaciable gula de la única potencia sobreviviente acompañados con sus aliados.
Desde entonces, todos los países aliados de la Unión Soviético, eran, son y seguirán siendo perseguidos, difamados, desprestigiados e inclusive derrocados. Las naciones unidas, después de la caída del murro de Berlín, fue y aun se encuentra secuestrada, por las novedosas maquinarias de terror, compuesta por insignificantes grupos de la población mundial, se autodenominan dueños de la única verdad y la imponen con mucho ímpetus, violentando todos los tratados y leyes internacionales. Este imperio maligno, está compuesto por los sionistas (judíos) anglo masones (cristianos) y los selafies (musulmanes). Sus poderíos económicos, bélicos, científico, mediático y lo esencial el poder político, son excesivos.
El veto ruso perdió credibilidad, fuerza y respeto ante el concejo de seguridad, la madre patria, se despeñó como simple y subordinado observador, ya que Irak y Libia gozaron del veto ruso y chino, aun así, los sanguinarios colonizadores cobraron por destruir y recaudaran aun más por la reconstrucción que ellos mismos demolieron.
La inquebrantable Siria, el último socio, aliado y bastión que le queda a Rusia, e inclusive es su única salida hacia el mediterráneo y el atlántico. Aborda por más de dos años, una dolorosa y novedosa guerra futurista, confrontando a mercenarios internacionales, caníbales, asesinos y violadores. Financiados, amaestrados y acarreados por el maligno eje imperial, más aun, les implementan injustas sanciones a Siria, ante la ultrajada y sumisa ONU.
Como en antes, el medroso y pavoroso apoyo ruso, aun no ha llegado a su gloria o ser contundente. Ahora todas las sádicas monarquías árabes, en especial Arabia Saudita, Qatar y Bahréin, logran influir y presionarlos con sus socios del eje imperial, los amenazan y los chantajean con los inhumanos mercenarios y terroristas internacionales, de origen selafies. Igualmente Rusia está quedando rodeada por el eje imperial, inclusive países de la antigua unión soviética, se enfilaron, países vecinos y fronterizos prestaron su territorio para las baterías anti balístico. La realidad jamás ha sido tan vulnerable o amenazada como ahora, aun así no se ve la contundencia de La madre patria, que antes sucumbió por obligaciones financieras, ahora se encuentra emancipado, hacia su necesaria y urgente grandeza, para la paz y el equilibrio mundial.
Los hijos de la madre tierra, exclaman con gritos amortiguados, es tiempo del sacrificio de la madre patria, y en esta ocasión evitar la última guerra mundial. Podrán esquivarlos, pero más temprano que tarde, tendrían que confrontar este eje imperial y obtusos explotadores. Van por ustedes los países del BRICS. Como lo hicieron los países aliados en la II, G.M, en contra el trió Alemán, (nazi) Italia (fascista) y Japón. En cambio vemos como los malignos cabecillas de los países imperiales, logran que la madre patria, no sea contundente en la autodefensa de su nación y a sus aliados. Mientras los novedosos y numerosos países aliados de Rusia, ven con mucho interés y pendiente de la lealtad rusa, hacia sus aliados y nacion.
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