De nuevo el terror de la guerra parece imponerse.Poco a poco nos
acostumbramos cada vez mas a esas escalofriantes noticias,que
llegan por todo tipo de medios de comunicación.Crueles asesinatos
-algunos masivos- que prácticamente rayan en genocidio.El terror como
política de estado.El Fundamentalismo Capitalista en busca del Poder Total, nos
esta regresando a etapas de la historia que ya creíamos superadas.
En favor de la ortodoxia y el fundamentalismo socialista debemos reconocer
que han quedado prácticamente relegados al pasado.Con la disolución de la
U.R.S.S , el viraje que dio la República Popular China,mas las intenciones de
la república de Cuba de abrirle las puertas a un modelo socialista mas
dinámico,hablar de un fundamentalismo y de un totalitarismo,
enmarcado dentro de los nuevos estados progresistas, no seria ni real
ni seria justo.
En contraposición, el totalitarismo capitalista , parece que no querer
ceder terreno a una política económica progresista que mejore las
condiciones de vida de quienes viven bajo sus principios.Es la
dictadura del capital, que abarca no solo el poder económico ,sino
que también persigue y compromete al poder político.
Mas alla de nuestras diferencias raciales y de otras que nos
condicionan de forma natural,como a una especie animal de
características diversas,están las diferencias que nosotros mismos
hemos creado, en nuestra tarea de mantenernos vivos.Diferencias
esencialmente económicas y políticas que han evolucionado a través de
tiempo y del espacio,hasta completar el escenario de hoy, en el que nos
enfrentamos a una terrible encrucijada.
¿Quien debería de administrar nuestras sociedades
contemporáneas?¿Quienes deberían controlar los recursos de los que
disponen?¿ Una clase social poseedora de la propiedad privada de los
medios de producción que maneje el poder económico y el poder
político en forma casi totalitaria, u otra en la que el trabajo de
administrar-esencialmente político-y del producir -esencialmente
económico- queden separados,por el bien de la sociedad humana
Mientras tanto, en medio de esa lucha por El Poder Total que han
emprendido las elites capitalistas occidentales,se encuentra una
humanidad aterrorizada y asustada.Manipulable,en la misma medida que
crece el terror que se le impone,que ya no son solo intervenciones
militares directas o indirectas,sino también guerras mediáticas,
psicológicas y económicas.La privación de la satisfacción de
necesidades ,como la alimentación,y el saboteo y otras casi
indispensables como los servicios de energía eléctrica y agua potable
peor aun la privación de algunos bienes que por su naturaleza podría
considerarse como un delito de lesa humanidad como por ejemplo el
saboteo al suministro de la leche que necesitan los niños,de sus
pañales o el de las indispensables proteínas animales que vienen con
las carne de res ,de pollo ,de pescado etc etc,solo revelan el nivel
de intensidad de la guerra económica que libra el pueblo venezolano.Un
pueblo bravío,sin lugar a dudas.
Un mundo de mas de 7 mil millones de seres humanos , que han perdido la
opción de salir a pescar,a recolectar y a cazar,como en sus tiempos
mas comunales y primitivos,y que ahora dependen de sus decisiones
políticas económicas y sociales ,de su capacidad de combate en el
ámbito de la conciencia y de la búsqueda de algunas verdades que le
devuelvan la paz.
Un mundo que busca recuperar la confianza que deposito en aquellos a
los que la historia permitió mantener como propiedad privada los
medios de producción de bienes y servicios,y que ahora buscan una
sociedad totalitaria, distopica, en la que pretenden desaparecer los
estados y convertir a las pueblos en empresas privadas,a través de
dosis cada vez mas venenosas de neoliberalismo.
En medio de ese mundo...ruge el pueblo de Bolívar .