El mismo error que cometió Chávez y ahora Maduro....... lo cometieron Lula y Dilma. Cuanta claridad .... "El capitalismo usa su arma para perpetuarse, los grandes medios de comunicación... y los corruptos serviles del mismo"....
“El error de Dilma y Lula fue proponer una fórmula de conciliación de clases”
Vemos como el golpe parlamentario se ha dado tanto por los votos de la cámara de diputados, como la del senado, hoy Dilma ha sido suspendida de su cargo como presidenta del Brasil por 180 días. Tiempo en que la “Justicia Brasileña” dirá si es o no culpable.
EL PUEBLO NÃO se mueve PARA DEFENDER A Dilma
Y……el pueblo no se mueve para defender a Dilma.
Queda en el aire esta interrogante. ¿?
Al igual que ocurrió en Honduras y el Paraguay, el golpe parlamentario se va concretando. Algo tiene que ver y mucho, el reciente viaje de Obama, a tierras del Sur, sus serviles lacayos, recibieron las órdenes para actuar y accionar contra el pueblo brasileño y su presidenta Dilma R.
El dinero verde, los dólares se movieron generosos en manos de los lacayos brasileros, tanto la Cámara como el Senado está lleno de corruptos, esos corruptos convictos, pero no sentenciados gracias a su fuero parlamentario, con sus votos han sentenciado a Dilma.
Quieren regresar a Brasil al neoliberalismo, y a las empresas brasileñas supeditarlas a los intereses de las macro empresas estadounidenses. De nuevo, quieren regresar como Macri en Argentina, a las ganancias monstruosas, y a la explotación del pueblo trabajador que labora en sus empresas. Ignorando como siempre al obrero, que es el que con su trabajo y plusvalía aumenta sus riquezas.
El golpe sigue su marcha con el ok de Washington D.C.
De las ocho centrales sindicales brasileñas una apoya el golpe. El paro general obrero, proyectado por los trabajadores para antes de la votación del senado fracasó. Vemos como el plan golpista parlamentario sigue su marcha en Brasil, y están listos sus socios, para aplicarlo en Venezuela contra el presidente Maduro Moros de inmediato.
Triunfa de nuevo el golpe parlamentario que ha roto en dos toletes la democracia del pueblo brasileño. Vivimos una grave crisis económica y los capitalistas frente a esa crisis necesitan recomponer su tasa de ganancia, volviendo a los patrones del neoliberalismo, o sea, quitar derechos de los trabajadores, entregar nuestras riquezas como el petróleo, la minería, el agua, la biodiversidad a las empresas transnacionales y mantener las tasas de interés muy elevadas. La presidenta Dilma era un muro que se oponía a eso.
Temer es el Macri brasileño, con la diferencia que Macri tuvo votos y él no tuvo votos.
El Gobierno de Lula en los dos mandatos y después Dilma proponían una fórmula para nuestro país. De concertación de clases como fue en Chile, una fórmula de conciliación de clases, propusieron que parte de los cargos se designarían a sectores de la burguesía brasileña.
Lo mismo pasa ahora en Venezuela.