Es aburrido y sumamente fastidio, que en repetidas oportunidades, culpo y divulgo, al mismo individuo u organización, ya que se entendería como una discriminación, exclusivamente en contra una colectividad. Pero lamentablemente el mal es eternamente maligno, jamás cambiaran, solo reculan las hojas y los apodes, pero continuamente resultan ser los mismos adiestrados directores de las inteligencias imperiales. (Mercenarios de cuellos blancos)
En el transcurso de la historia humana, toda los terrícolas supuestamente racionales, lamentablemente, erróneamente y cruelmente, se han acostumbrados, moldeados e inclusive lo han adiestrados, a través de los poderosos medios de comunicaciones, primordialmente para desprestigiar, luego convencer y finalmente aceptar, las desgracias en contra, específicos territorios, razas, naciones, culturas, políticas y religiones, señalados vilmente e injustamente como indignos, inhumanos y despreciables. Así la opinión de la mayoría de los mortales, tragarían, tolerarían e inclusive inducirían con más facilidad, sus matanzas.
Luego de la caída del comunismo, el islam, no tuvo oportunidad, ya que los relevo forzosamente, como los nuevos despreciables. Acostumbrados a este papel, en donde han logrado resistir y sobrevivir siete sangrientas e injustas cruzadas, y la octava se encuentra, silenciosamente y disimuladamente en pleno desarrollo.
En la actualidad, cuando los actos de terror son perpetrados intencionalmente en los distintos territorios imperiales, por los mismísimos cuerpos de inteligencias, peros los actores en esta oportunidad, son supuestos musulmanes, patrocinados por el acostumbrado eje maligno. El enfoque se agiganta, la visión se aclara, la lógica se implanta, y el guion se consuma. Finalmente las banderas falsas, solo ondearan en sola dirección, el nuevo y odiado monstruo debe ser el islam.
En realidad, visualizando la perspectiva del terrorismo desde arriba, siempre terminan siendo los mismos figurantes, el eje imperial, utilizando a los sinfines de reclutas y desechables jornaleros, escogidos entres los raudales que en su mayoría, son chantajeados, lavados los cerebros, desquiciados fanáticos, violentados y extremistas con sed de venganzas en contra el eje maligno, a quienes no los conocen a simple vista, pero si, que lo sufren en carne propia. En conclusión, son necesitados, resentidos y ordinarios mortales, no tienen nada que perder, pero mucho por ganar.
Todos estos desafortunados e inconscientes miserables, son presas fáciles, para ser manipulados y guiados por un supuesto aleados, en contra un indeterminado y presunto enemigo. La confusión los acobija, la rabia los a ciega, la necesidad los impulsa y la desesperación los estimula, terminado cometiendo lo opuesto. Guiados y asalariados por su invisible enemigo natural, matando a sus similares o inoportunos e indefensos mortales. Todo lo demás señalamientos, que suenan y parecen lógicas, son simplemente, mentiras verdaderas. Ejemplo.
Un reconocido operador de alto rango de la inteligencia israelí, Richard Gutjahr, marido de Einat Wilf ’s, quien es alta comisionada y oficial de WINEP, (Instituto de la Política de Washington del cercano oriente) logro sorprendentemente filmar ambas escenas, en el preciso lugar y en tiempo real, antes, durante y finalización de los cobardes y diabólicas masacres, que ocurrieron en Niza y luego Múnich, a manos de supuestos musulmanes. ¿Cómo pudo lograrlo? ¿Quién pudo iluminarlo? La respuesta es visible, pero es erróneo desenmascáralo.
Lo más sorprendente, el director de investigaciones de este mismo instituto WINEP, Patrick Clawson, descaradamente dijo, cito: Usamos todas las estrategias posibles para provocar una guerra en contra Irán, pero ellos aún no han caído en las provocaciones que constantemente les proporcionamos. Con mucha frialdad prosiguió diciendo, necesitamos ahora los que todos los presidentes norteamericanos precisaron para ser inducidos a ingresar a la, I GM, II GM, Vietnam, Irak y Libia. (Actualmente, ya no es un secreto para nadie, porque el mismo gobierno imperial, como Henry Kissenger y otros, los han confirmado en varias ocasiones, que ellos mismos crearon, todos los auto-atentados del pasado, para tener el pretexto a incorporarse en las diferentes guerras). Finalmente dijo, ahora solo necesitaríamos que alguien haga las necesarias provocaciones, para que el presidente de EEUU, pudiera ir a la guerra, en contra Irán.
Más claro no canta el gallo.