A la grave crisis que vive Venezuela por falta de liderazgo y vacío de poder, ahora se nos suma el peligro inminente que representaría el ascenso del uribismo, en caso de que gane la elección de este domingo 27 de mayo. Recordemos que fue el expresidente colombiano, quien tuvo el tupe de confesar que no invadió nuestro territorio "porque le faltó tiempo". También la situación tiende agravarse, toda vez que el mundo occidental ve agotarse sus materias primas, y en consecuencia las potencias imperialistas acarician la posibilidad de echarle mano a nuestros recursos naturales, hoy, a merced de una terrible incertidumbre, porque lamentablemente nuestro Estado se ha hecho más débil, además de aislarse de la comunidad internacional por incompetencia de la Cancillería.
Al cuadro nada halagüeño, por no decir dantesco, se agrega la incorporación de Colombia a la Organización del Tratado del Atlántico Norte, prevista para el 31 de mayo. Por esta y otras razones, sobran los motivos para preguntarnos: ¿Podemos estar tranquilos, a sabiendas que dormimos con el enemigo al lado, y que EEUU está a la caza del primer descuido para rematar su faena neo colonizadora? ¿O nuestras Fuerzas Armadas están o no en condiciones de plantear una pelea de burro contra tigre? Amanecerá y veremos.