Gobernantes arrogantes atorrantes negociantes, utilizan el poder para capitalizar sus fortunas, sacrificando a sus pueblos. Suelen citar a Dios o a La Biblia a fin de impresionar a pesar de tomar medidas nada cristianas, perjudicando a los sectores más necesitados. Piden votos en rumbosas campañas electorales para Jefes de Estado, y luego abandonan y reprimen a los sectores más desasistidos. Esa clase de mandatarios ven en USA -pese al fracaso global imperialista gringo-, un ejemplo de "libertad y democracia".
Bush jr. en la presidencia se atrevió a afirmar que había hablado con Dios, ese día el consumo alcohólico le hizo quedar en ridículo, más de lo acostumbrado. En Abril 2019 por una referencia a La Biblia que hizo Donald Trump, áulicos interpretaron que Dios rige las disposiciones del magnate presidente que ha cometido mayores torpezas que ningún otro mandatario estadounidense, frente a los destinos del imperio decadente e invasor, empeñado en inponerse como gendarme del mundo.
En Latinoamérica, sinvergüenzas pitiyanquis vende patria desde sus presidencias entregan la soberanía del terruño natal, lo admiten y por vía de componendas parlamentarias, o por sospechosas elecciones como en la Venezuela de la adecopeyanquicracia "acta mata votos", acceden al poder por el sufragio para ejercerlo arrodillados cual mandaderos del imperio mercantilista amenazante y depredador. Lo hacen para salvarse de ser acusados de negocios turbios, advertidos por EE UU que les conoce la vida, y una vez colocados en la Presidencia los convierten en sirvientes pela fustanes de la Casa Blanca.
En la Venezuela histórica de la herencia bolivariana antiimperialista, nos negamos por mayoría a caer en esas fauces, y ungir monigotes a lo Piñera en Chile, Macri en Argentina, Lenín Moreno el ecuatoriano, o el Bolsonaro brasilero, que cita La Biblia casi en Semana Santa, para ayudarse ante los desaciertos y la impopularidad que le conducen al chiquero de la historia política. Mientras tanto USA usa títeres que por todo pasado se lucieron bajándose los pantalones en manifestaciones mostrando el trasero, y ahora son ascendidos por bajarse los mismos pantalones ideológicos..., y cumplen órdenes dictadas a un gobierno paralelo creado en Venezuela, para beneficio y comodidad de obsecuentes generales sin tropa ni prestigio, razones por las que no convencen.