En las últimas semanas, el mundo ha estado mirando con real o aparente preocupación, los convulsionados momentos políticos que están sucediendo en el llamado sub-continente latinoamericano, con toda la carga simbólica, que significa la agitación social, en la región más desigual del planeta…y el impacto mediático – político, que tiene sobre la mirada imperial, cuando observa "en su patio trasero" , los acontecimientos de unas masivas movilizaciones con la participación de amplios y variados sectores sociales enardecidos, por la aplicación de medidas y paquetazos, que han recibido un evidente, notorio y comunicacional rechazo a las recetas económicas neoliberales, que desmejoran de manera contundente e inmediata el poder adquisitivo de las grandes mayorías…
Protestas antigubernamentales que han sido atacadas con una brutal represión que no resisten la más mínima evaluación y presentación de los llamados "informes técnicos" sobre la violación a los derechos humanos, por parte de gobiernos de la derecha latinoamericana, que se auto declaran pro imperialistas y aliados incondicionales de Trump…que ante tanto sospechoso silencio de los organismos dedicados a la defensa de los DDHH, tanto de las Naciones Unidas, como de la Organización de Estados Americanos, no le dan importancia y lo logran invisibilizar de tal manera, que uno puede llegar a una primera aproximación interpretativa : los DDHH es un arma política para condenar a los rivales ideológicos, y eso permite, satanizar al enemigo al "castigarlo" con un pronunciamiento político: en los países con gobiernos antiimperialistas o que no son del agrado del imperio, se les declara como Estados violadores de los derechos humanos…
Tenemos como ejemplo, la represión en Honduras y en Haití, pero como son gobiernos de la derecha, solo acusan a los manifestantes como violadores de los DDHH…si observamos el caso colombiano es bien emblemático, allí hay de todo: el país mayor exportador de drogas en el mundo, con millones de personas desplazadas que viven fuera de su territorio, los asesinatos a diario de los llamados líderes sociales y ex guerrilleros…los lamentables episodios callejeros en Ecuador…y tenemos el caso chileno, que no sólo desaparecen a las personas, sino que también a la defensa de los derechos humanos, que no son su prioridad, y además, el imperio, no va a permitir, que la izquierda internacional se aproveche políticamente, y que nadie debe poner en duda quien es el que "certifica", si un Estado cumple con la real defensade los derechos humanos, y eso lo hace el gobierno estadounidense, porque se consideran "los jueces del mundo"…
Las consecuencias reales es que por ejemplo, el Uribismo y el Pinochetismo, tienen serios problemas de legitimidad, a pesar de que no son acusados formalmente de violar los derechos humanos…demostrando que existe una evidente manipulación política, con el tema de los DDHH…