La salida de Evo Morales del gobierno va ser el hervidero de los próximos días, claro que vendrán días de duros combates en las calles, la reorganización de muchos y la discusión en todos los foros posibles, claro que el gobierno de Evo llevó a la población boliviana a ver la vida con otros ojos y otra miradas, el mejoramiento de la calidad de vida es inobjetable (a diferencia de Maduro) que ha llevado a la población venezolana a situaciones de hambre, miseria desconocidas en todo el continente. Nicolás podría ser perfectamente en lo económico, social y político la antítesis del boliviano.
Pero la política y el gobierno son mucho más que comer y beber o aquello de la tentación a Jesús "No solo de pan vive el hombre" Mateo 3:16–4:4. Lo que sería difícil negar es que la continuidad de un hombre en el poder agota y nos agota y demuestra con triste objetividad que en este se carga todo lo bueno y lo malo que ocurra en una sociedad, creer que las fuerzas armadas pueden ser garantía de un sistema democrático, de civilidad, de respeto a voces adversas están alejados de la realidad como esperar que los perniles de Maduro se puedan servir en alguna mesa venezolana que no sea de altos mandos militares o jefes de gobierno municipal, regional o nacional en Venezuela. Creo que esas cosas que ocurren, la falta de alternabilidad de liderazgo en el MAS de Bolivia y en su gobierno hizo que el material se agotara y terminó por agotarse.
Hace algún tiempo comentaba con una amiga la historia del perico y mi papa, imaginemos por un segundo que el perico representa un pueblo o un individuo. Lo cierto es que mi papá un día encontró un periquito que estaba bastante maltratado lo llevo a casa, le dio pan y leche, semillas de girasol y hueso de Jibia para el calcio, una jaula grande y agua, también cubría la jaula con un trapo oscuro para que el animalito pudiera reposar, mi viejo y el perico. Se sacaba a la calle a llevar sol y les hablamos en el día, se compuso y se hizo fuerte y sus plumas crecieron y era lindo y brillante todo su plumaje. Pero un día el periquito voló, alguien había dejado la jaula abierta y ya el animalito no regreso. Había decidido arriesgar, explorar su instinto lo había llevado a dejar un lugar que creíamos seguro para volar, explorar, experimentar y no solo vivía del pan o las semillas también vivía para vivir.
Las acciones de Evo y su gobierno claro que fueron importantes, pero no solo fue el pan y la seguridad y hacer de Bolivia un país mejor, no es el mundo de una miserable derecha boliviana que raya en el fascismo, tanto como raya el PSUV en Venezuela, casi catorce años de gobierno me hacen presumir que muchos sectores de Bolivia pedían un cambio, lo de la caída del conteo de votos, terminó por hacer que la incredulidad tomará espacios ( en Venezuela el gobierno cuenta y si gana el adversario sólo inhabilita el triunfo) hay ejemplos de que en más de una ocasión los sistemas electorales se caen y que los pueblos actúan según su capacidad, en México en los años 80s del siglo XX ocurrió un episodio que luego sería conocido como "La caída del sistema" y para algunos analistas fue el comienzo de la descomposición y fractura de uno de los cuerpos políticos más exitosos del mundo o sea el PRI. https://www.proceso.com.mx/159468/la-caida-del-sistema-culminacion-de-una-historia-de-manipulacion-y-autoritarismo
Nunca sabremos quién gano en las elecciones presidenciales de México 1988, tampoco sabremos que paso en Bolivia 2019. Lo cierto es que el sistema de cómputo no se debió haber detenido y es casi seguro que de haber existido una segunda vuelta el conflicto actual se hubiera evitado, creer que los militares son garantía de institucionalidad me lleva a recordar a Víctor Jara aquello de :
Que los derechos humanos
los violan en tantas partes,
en América Latina
domingo, lunes y martes.
Nos imponen militares
para sojuzgar los pueblos,
dictadores, asesinos,
gorilas y generales.
Recordar que en Bolivia los militares al igual que en toda Latinoamérica han realizado y dirigieron gobiernos muy alejados de la defensa o el respeto a los derechos humanos. Bolivia tiene una gran experiencia en lo que ha gobiernos militares se refiere, la perversión, la criminalidad, el odio hacia todo lo que sea civil, obrero, indígena, pobre es increíble y para muestra un botón de lo que son los militares bolivianos: El gobierno de García Meza, falto de toda clase de apoyo político o social, hizo uso del terrorismo desde el Ministerio del Interior a la cabeza de Luis Arce Gómez. Hubo alrededor de 500 víctimas de sus acciones entre desapariciones forzadas, torturas y persecuciones6 y alrededor de 4000 detenidos según los registros de la ASOFAMB.5Notable entre los muertos es Marcelo Quiroga Santa Cruz, diputado nacional promotor del juicio de responsabilidades al dictador Hugo Banzer Suárez. Posteriormente se produjo el asesinato de ocho líderes la dirigencia clandestina del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) en la Masacre de la Calle Harrington (La Paz) el 15 de enero de 1981. La única persona que logró escapar con vida fue Gloria Ardaya, que posteriormente fue apresada, torturada y exiliada.
La salida seria nuevas elecciones, con un nuevo árbitro electoral creíble. Comparar el gobierno de Evo en sus logros sociales y económicos con el de Maduro es confundir gimnasia con magnesia. La batalla social apenas comienza y ojala y los militares bolivianos puedan por una de esas extrañas veces cumplir su compromiso de respeto a la democracia y a su nación. Bolivia está ahí demostrando una gran vitalidad política y el único panorama son nuevas elecciones, con reglas claras y trasparentes. Lo otro es violencia, esa violencia tan conocida y no deseada ni por nosotros y tampoco por quienes la vivieron alguna ocasión en nuestro mestizo continente.
Notas a pie de página: Como inquisidores del siglo XXI se comportaron los miembros de la extrema derecha boliviana, solo les falta empalar a opositores a su acción y hacerlo público: Camacho citó en público a Pablo Escobar como sinónimo de lo que debería hacerse en Bolivia – sugirió anotar en una libreta a los traidores al estilo del narcotraficante – y corrió a Carlos Mesa, el principal candidato presidencial opositor, del escenario combustible que se está armando en el país. Ahora es él un primer actor.https://www.pagina12.com.ar/230272-quien-es-luis-fernando-camacho
EL CAMBIO EN Venezuela deberá ser para ampliar y profundizar la democracia, la derecha de Bolivia son simplemente genéticamente muy parecidos al gobierno cínico/militar que hoy decide los destinos de Venezuela.