Acabo de escuchar por tv internacional, la coz verbal de un jumento humano "Si alguna vez tuviéramos que hacer algo en Venezuela sería una invasión" afirmación de Donald Trump. Un examen de capacidad mental para aspirar la Presidencia de una nación debería ser regla universal. De esa manera la humanidad hoy víctima de la pandemia más letal en la historia debido al coronavirus o Covid 19, evitaría que fuesen electos individuos de criterios tan lamentables, que intensifican la muerte de ancianos que son los más vulnerables, y personas de toda edad incluyendo niñas y niños, por darle prioridad ciertos personajes economicistas, clasistas y racistas, antes que la solidaridad racional entre seres humanos.
Las disputas de colaboradores que fueron asesores y ministros muy cercanos a la influencia de poder en sus respectivas naciones, y le han renunciado a mandatarios como Jair Bolsonaro en Brasil, Hernández el Presidente pronarco de Honduras, Duque el sub presidentucho de nuestra vecina Colombia, o el mismísimo jefe actual de la oratecracia mundial representativa, en el imperialismo genocida de EE UU lleva el mismo nombre de un famoso personaje canino de Walt Disney, y este Donald deja muy atrás la nobleza animal del mejor amigo del hombre, irrefutables pésimos ejemplos de mandatarios "representativos".
Una sola prueba me sirve de referencia y la redacción de la noticia la dejo tal cual la ha leído el mundo: "El Ministerio de Salud de Brasil admitió récord de fallecidos por coronavirus el 5 de Mayo, ha venido aumentando por la terquedad del Presidente Bolsonaro, son las más altas cifras de América Latina donde ningún otro país tiene un registro tan alto de víctimas fatales por la enfermedad, más muertes que en China y Rusia. Brasil tiene semanas figurando entre los diez primeros del mundocon más fallecidos superando a China e Irán. Informarse es imprescindible.
Complicado justificar a quienes den apoyo en Venezuela a politiquerías mezquinas, no transmitidas en su contexto estadístico por medios de comunicación aberrantemente obsecuentes a gobernantes que tapan la realidad de las estadísticas del Covid 19, certificadas diariamente por la Organización Mundial de la Salud y la Universidad Jhon Hopkins de EE UU, o las advertencias del New York Times y el Washington Post, rotativos que recriminan a Trump por ocuparse de Venezuela y no de las muertes en EE UU por problemas sanitarios descuidados, y esos medios han atacado ferozmente a la revolución socialista bolivariana. Saque conclusiones y gracias que usted vive en Venezuela.
Usted señor, usted señora o señorita, a ustedes opositores, les respeto el derecho democrático a serlo, me preocupa saber si aceptan que de darse los propósitos perversos de intervención extranjera solicitados por los que reciben ayuda del exterior y viven con dinero robado a su país, vayamos a caer en manos comprometidas de pseudolíderes que firman acuerdos con una empresa extranjera en contrato de desestabilización y violencia, lo cual significa postrarse de rodillas ante unos malandros, mafiosos pandilleros.
Los supuestos "líderes de oposición" comprometen 212 millones de dólares con una empresa propiedad de un canadiense mercenario internacional, y no aportan un céntimo de "ayuda humanitaria" a los infortunados venezolanos que entusiasmaron a irse del país, hoy abandonados por ellos, y a la espera de rescate con el programa revolucionario "Vuelta a la Patria".