A Penélope se le está acabando la fuerza moral para esperar la llegada de su marido y para detener las ambiciones de los pretendientes, que le acaban los recursos para vivir. Y que hará Penélope con el abrigo que cose y descose; si el invierno y el frío está por llegar.

Lo mismo le sucede ahora a Europa. Esta región del mundo, ha perdido la fuerza moral y la energía que le daba independencia y competitividad industrial frente a Estados Unidos y a la misma China; no tiene muchas opciones inmediatas ni a mediano plazo que le permitan salir de los problemas que sus líderes políticos y gobernantes crearon y siguen generando para la misma Europa.

La gente ya está en las calles, pues son ellos y los Estados los que pagan los costes de la inflación y de la ayuda militar y financiera a la OTAN que combate en Ucrania contra Rusia. En las pancartas y consignas, se puede leer la problemática que atraviesa la gente, son problemas serios que tienen que ver con los altos costos de la electricidad, el temor al frio por la escasez de gas, los altos precios de la gasolina y de la sesta básica de sobrevivencia. Sin embargo, todavía no logran salirse del enfoque dominante, por temor o por tergiversación informática de la manera de ver la guerra en Ucrania. Pues, no se lee todavía con claridad, en sus expresiones de disgusto, la causa de sus males. Pues todavía, se la achacan a Rusia

Aunque, las circunstancias han llevado a los gobiernos y a la población media, a mantener una irracional rusofobia, combinada con recientes amenazas nucleares y de crear caos en Rusia para derrocar a Putin y su gobierno; y la más reciente, que consiste en crear un nuevo orden sin Moscú. Que es más bien un bloque de la UE+ 17 países que, según ellos, es un nuevo formato para enfrentar a Rusia y buscar solución a sus problemas energéticos, sin Rusia.

Parece que, en la realidad es el invierno el que obliga a los europeos a definir posiciones diferentes ante Rusia.

Pero, tal redefinición está por verse, pues el invierno no ha llegado y la maquinaria de propaganda de la Otan, está muy activa. Los corresponsales y las agencias noticiosas occidentales al servicio de la Otan, mienten sin vergüenza. Promueven constantemente la valentía y los avances del ejército ucraniano; sin mencionar a sus receptores el papel y la cantidad de mercenarios ni los países de origen, así como callan los bombardean a la población y la infraestructura civiles realizadas por las valientes tropas ucranianas.

Ahora, tales medios están promocionando la campaña de chantaje nuclear, la destitución de Putin.y su gobierno y la que tiene que ver con las esperanzas de los que quieren volver a la estrategia inicial de atraer a Rusia a la OTAN, debilitarlos y destruirlos. Expresadas por los personajes implicados en la guerra como Biden, Zelenski, John Bolton y los que temen a la guerra como Merkel, Kissinger, Erdogan.

La UE+17 es la más fría manifestación que revive la guerra fría, crea la cortina de hierro, amaga con el uso de armas nucleares, se plantea el aislamiento, debilitamiento económico de Rusia y la destitución de Putin y su gobierno. Miremos los datos:

El presidente de Polonia reveló que su país mantuvo conversaciones con Washington sobre la posibilidad de instalar armas atómicas en Polonia.

Biden en marzo 2022: "Por el amor de Dios, este hombre [Putin] no puede permanecer en el poder" "Expreso indignación moral… y no me disculpo por ello."

John Bolton/octubre 2022: "No hay perspectiva a largo plazo para la paz, y la seguridad en Europa sin un cambio de régimen en Rusia." "El objetivo estratégico obvio de Washington es que Rusia se alinee con occidente, un candidato adecuado para la Otan, como esperábamos después de la ruptura de la Unión Soviética."

Tales declaraciones definen dos posiciones frente a Moscú, miremos:

La primera, sostenida por Washington y la UE+17 consiste en, continuar la guerra, reabrir la guerra fría y aprovechar lo que le duele a la gente para caldear los ánimos, que la gente buena salga a las calles, que pierda los estribos, hacer que Rusia pierda la fuerza moral y apoye el descontento y empuje el caos y las acciones subversivas, en lugar de combatir esos hechos. Y la segunda ruta, que siga la guerra, pero atraer a Putin a occidente, como se hizo con Gorbachov. Dialogar y llegar a acuerdos convenientes y a la vez impulsar la plataforma de la UE+17. Esta es la posición de viejos políticos occidentales como Ángela Merkel y Henry Kissinger.

Pero, más allá de las palabras que usan unos y otros, lo que sí está muy claro es, la existencia de dos maneras que se están impulsando para derrotar a Rusia, desde una línea propagandística de héroes y villanos.

No hay tales Artemisa, Penélope, Ulises, Telémaco, los príncipes pretendientes, bordar abrigos y las sirenas y los tapones de cera. La cuestión es que, no existen héroes sin villanos y que las acciones valerosas de los héroes no serían tal sin un antagonista que los lanzara a la aventura y les obstaculizara su misión. Para mantener esta concepción, necesitan la continuidad de la guerra; pues sólo así, se justifican las colosales ventas de armas y las jugosas ayudas financieras a Ucrania.

Es muy conveniente para los países de la UE+17, tener el villano, porque con él, se limpian todos los males: la crisis energética, la inflación, las elecciones, el frio. El villano causante de todos los problemas internos de sus países. No obstante que se cuenta con todo lo que se puede hacer teniendo al villano; la pregunta es, hasta cuando durará esta justificación, dado que los europeos ya quemaron las naves y están más aislados que los rusos.

Pero, dado que los rusos siempre fueron pendejos para todo occidente; pues ya están ofreciendo reparar el Nord Strean y continuar vendiendo gas y petróleo barato a los europeos y le piden a Zelenski que vuelva a la mesa de negociaciones y que no sea muy (grosero) monstruoso.

Las cosas están planteadas así, lo que sigue es cuestión de moral y proyectos políticos capitalistas, en última instancia. Talvez, por ello, China comunista es cautelosa.