"Lo amo porque él ama a Trump. Cuando llamó, atendí su llamada. A cualquiera que me ame, lo quiero", expresó el aspirante a la presidencia de Estados Unidos.
Sólo una mirada bastó para que quedaran prendados el uno al otro, fue un amor a primera vista, no aguantaron dos pedidas, ambos salieron del closet, los ojos azules de Milei con una sola mirada de esas que llaman aquí en Venezuela, tumba cocos, impacto en el copete de Trump y lo despeino, mientras que Milei, ya soñaba con tener un copete amarillo como el del ex presidente e imitar sus gestos.
Es un amor apasionado, electrizante, tan rápido como el de Romeo y Julieta, pero estos se casaron a escondidas no sabemos si los mencionados supra ya se casaron o están en proceso. La única diferencia entre estos amantes apasionados y los de Romeo y Julieta, es que en el caso de Romeo, las familias se odiaban en forma irreconocible, mientras que entre los seguidores de Milei y Trump, que son casi su familia, los une un sentimiento de ultra derecha, que llevan en el alma y corazón.
No sabemos, lo averiguaremos, si la Ley de ambos países permiten que los presidentes tengan su Primera Dama, con una nacionalidad diferente y viviendo en otro país. Esto podría ser un obstáculo para ese torrente amoroso que los arropa y los derrite, pero en los Estados Unidos cualquier cosa es posible. Recuerden por ejemplo, que para salvar a Clinton, de la montada de Cacho a Hilary, con una Pasante de la Casa Banca, de nombre Mónica Lewinsky, un sabio Juez de ese país, sentenció que el cunnilingus, es decir el sexo oral, hablando en cristiano, no era un acto sexual. Bendecido Clinton con esta sentencia, absuelto de toda culpa, se salvó por un "tris", "El Mundo Libre" y todo terminó felizmente como en el cuento de princesas que promociona Disney.
¿Cómo se desarrollará ese tórrido romance? Está por verse. La prensa internacional y farandulera, ya empieza a recoger en sus páginas rosas y difundir escenas de este amorío, que posiblemente sea llevado a la pantalla por una serie de Neflix o la cinematografía hollywoodense.
Ya Latinx Now y Hola, órganos especializados en chismes y farándulas dieron la buena nueva a sus fans:
"Ambos políticos ya han tenido su primer vis-á-vis en el que se dieron un abrazo. "¡Viva la libertad, carajo!, dijo Milei, mientras que Trump, grito: ¡Abajo Biden y Yo arriba¡
Hablé con un amigo, especializado en estos temas románticos y que es un buen consejero para estos trances amorosos donde se involucra la política y le pregunté: tú crees que este amorío llegue a final feliz y me dijo:
"El amor llega cuando menos te lo esperas, o eso dice mucha gente. En realidad, nadie elige cuándo enamorarse, por lo que en cualquier momento puede aparecer la persona indicada que te robe el corazón."
Me parecieron sabias sus palabras y recordé a Simón Díaz y su Caballo Viejo, con estas estrofas.
"Cuando el amor llega así de esta manera
Uno no se da ni cuenta
El carutal reverdece
El guamachito florece
Y la soga se revienta"
"Cuando el amor llega así de esta manera
Uno no tiene la culpa
Quererse no tiene horario
Ni fecha en el calendario
Cuando las ganas se juntan
Y aquí, con este amor a primera vista, la soga parece haberse reventado, el reloj se volvió loco, las ganas se apechugaron y el calendario juntó a estas almas de derecha que se juran mutuo amor, en un romance que sería muy bien interpretado por Julio Jaramillo o un compatriota de Trump, José Feliciano.
