NOTA. Esta opinión la redacto el 5 de noviembre coincidiendo con la elección Presidencial anual en los U S A, para nada me interesan en honor a la verdad venezolana revolucionaria, socialista y bolivariana, ninguno de los dos candidatos, van a tener igual comportamiento estrafalario y perverso contra mi patria Venezuela. Ellos nos necesitan por el petróleo, pero nos atacan con sanciones internacionales írritas, diría JOSELO ese gran humorista y hombre de izquierda, ellos, los dos candidatos son la misma miasma…
Por lo visto en la televisión española y mundial, en medio de fallas en la atención oficial inmediata, los políticos hispanos se pierden en la maraña de conceptos adulantes en mayoría político partidista vendidos al pitiyankysmo, conducta que, ante el luto une a los habitantes afectados por la tardanza de la ayuda oficial, sustituida por los españoles en aptitud humanitaria vecinal, desatando en el fondo la rabia de los afectados debido al retardo de los organismos oficiales.
Los Reyes Felipe y Leticia, igual que el Presidente Pedro Sánchez y políticos visitantes a los pueblos afectados, han sido recibidos al grito de "fuera", en los peores desaires sufridos por monarcas hispanos y un Jefe de Gobierno, en la históricamente horrorosa política española, ya acusada desde los años 50 del siglo pasado por ser desde el General Francisco Franco, entreguista a los yankys, permitiéndoles en su larga dictadura y luego en igual comportamiento los civiles de la democracia, bases militares en España ocupadas por los explotadores estadounidenses.
Al monarca Felipe le lanzaron un palazo que casi alcanzó su cabeza y a la Reina Leticia la golpeó en la cara una pequeña bola de lodo, ambos abrazaban a los ciudadanos y varios se negaron a dejarse abrazar por los Reyes visitantes, quienes debieron ser retirados apresuradamente igual que el gobernante Sánchez y otras autoridades civiles y militares, los automóviles oficiales fueron golpeados (me gusta el término zarandeados, lo escuché en la TV española), por manifestantes enojados obviamente alterados ante el luto, los desaparecidos, la muerte de niños arrancados de sus casas por el agua o ancianos golpeados por automóviles y ciudadanos atrapados en sótanos dentro de sus vehículos, muchos aún sin rescatar en las calles de pueblos y ciudades hispanas. Reciban los españoles la solidaridad de esta tierra donde habitan bastantes cientos desde la época de Pérez Jiménez en Venezuela y su descendencia, no tenemos tutelaje extranjero y menos el de granujas gringos que ofenden a la tierra española y otras naciones europeas, afectada por la DANA descrita al inicio de este relato.
Nuestra Venezuela solidaria, amable, cordial y para nada xenófoba ni arrogante, es tierra de gracia en progreso económico y social constante, a pesar de los inconvenientes causados por los arrebatos de precios altos, disfrazados de necesidades por industriales y empresarios o los abusadores negociantes tradicionales explotadores decembrinos, historia que, nos arropa desde la era demócrata representativa de la cual heredamos esa mala costumbre. La mayoría votante del país, afortunada y resiliente mantiene en evolución revolucionaria al grito de NO VOLVERAN, las cifras suministradas e irrebatibles nos permiten exponerle al país y al mundo, el verdadero panorama, por encima de los apagones que nos perjudican y sus autores van recibiendo el castigo moral y penal correspondiente.
"Después no chillen", sus inventos y la complicidad de cierta prensa presa de bulos y fake news, no les resulta suficiente, se acerca el 10 de enero 2025, la juramentación será en la Asamblea Nacional, como lo pauta la Carta Magna, por el reelecto vencedor del 28 de julio 2024, Nicolás Alejandro Maduro Moros, los "cuentos de camino" de la oposición desquiciada y desacomodada son expresados y descritos con claridad más que meridiana histórica, en las intervenciones del Jefe del Estado, el único legalmente en Miraflores, el de las entrevistas con sus pares gobernantes en el mundo entero, el de la valentía nacional al descubrirles las malísimas intenciones violentas y virulentas que, desean imponer y no superan su disociación los adversarios contras, la confianza nacional, la paz del país y su desempeño superan dificultades. Esta es mi Venezuela, esta es la patria adonde regresan muchos de los engañados viajeros abandonados por su impericia al marcharse insuflados por la perfidia yankylófila que, hoy los desencaja y desencanta. Bienvenidos y con el pleno derecho demócrata eleccionario, su terruño natal los acoge.