Por favor no nos confundamos con las opiniones y análisis que se han realizado y se continúan expresando sobre la personalidad del "elegido". Como se suele decir en buen criollo "loro viejo no aprende a hablar" y el "electo" es un "businessman" en toda su personalidad como pudimos observar durante su campaña: "estaba vendiendo un producto". El capitalismo, hermano.

Ha comenzado con buen pie. Destituyó a la "damita de cobre" nombrando a un "afroamericano" de la naval con conocimiento en "redes y paredes". A los racistas militares de "ejércitos tradicionales" no les va agradar sentarse en la misma mesa. Ha sido un movimiento no esperado.

"El electo" sabe dónde "se cuezan las habas" y como desea pasar a la Historia de su pueblo, percibe donde "hay candela". Veremos cómo manejará los temas más inquietos del momento como son "las guerritas del abuelo", el gasto militar, la antropología social-interna, Rusia y China y siempre dejando un "espacio en momento" de cómo va a tratarse con "Nico", su dolor de cabeza, mientras está pensando que no es "Nico" quien ni se parece ni al "flaquito ni al viejito". Quizás, por ello, el nombramiento del "afro-naval" tenga algo de "nota". No lo va a tener fácil así tenga "the Hill" en un bolsillo. Los analistas pregonan que logrará controlar al "partido" en su totalidad.

A los "nuevos" siempre se les dan "los 100 días" pero el camarada es resabiado y aprendió profundamente como funciona el "Estado profundo" en estos años pasados y ello lo demostró durante la campaña. La verdad que a la "pobre ovejita" la llevaron al matadero, "nada en la bola". Su futuro es tan promisor que es oscuro. En cambio el gobernador de California se convertirá en el referente necesario a enfrentar en duelo de caballeros al mejor estilo medieval.

El señor huésped de la Casa Blanca, Donald Trump, tiene, básicamente, dos contradicciones fundamentales; la primera será cómo "manejará", no podrá solucionar, la realidad social-interna de los Estados Unidos de América. Entre esos subconjuntos se encuentran los "migrantes y latinos", no solo la utilización de drogas, estupefacientes y otras hierbas junto al "bojote de billullo" que se produce (Tulsa King), el significado real de la antropología social de los "sin-techos", los movimientos sociales que van desde la extrema derecha hasta la izquierda militante y Wall Street.

En sus realidades internacionales los problemas son aún más graves.

Enumeremos.

Dejando las "guerritas de lado", Ucrania y Palestina, muy graves en sí mismo por sus extensas implicaciones bien expuestas por expertos, Trump debe dirigirse a las realidades objetivas que giran alrededor de ambos escenarios, es decir, sus contradicciones importantes y fundamentales. En primer lugar, aún en sus declaraciones de las "24 horas" en lo referente a Rusia, detrás se encuentra lo fundamental de una realidad que ha estado dormida desde "Alaska". Ya no estamos en tiempos de la Zarina como tampoco del "padrecito" sino de "Vladimir, el Terrible" cuando el diseño de "expansión territorial", donde se menta que Miranda dio su humilde opinión, hoy tiene mayor sentido que antes cuando están desarrollando una ruta por Alaska hacia Ámsterdam.

China. Seamos objetivos. Los EEUU de América, el Poder real y los poderes fácticos imperiales norteamericanos no saben qué hacer con la República Popular China, el Partido Comunista Chino y el ELP. Es una verdad de perogrullo como diría nuestro recordado José Vicente Rangel. "El sol no se puede tapar con un dedo". Desglosemos.

El enorme número de subconjuntos en las relaciones bilaterales sino-norteamericanas han crecido en número y calidades durante la gobernanza del Presidente Xi Jinping. Es evidente que hay factores presentes de alta tensión con serias y profundas afectaciones en esas relaciones bilaterales. Lo tecnológico, Taiwan, el tan odiado acuerdo de "mutuo beneficio" sino-ruso de amplio espectro e importancia, los impactos en la economía global con serias afectaciones en el comercio internacional y las "enseñanzas de Kong Fuzi".

Me permitiré tocar un solo tema. ¿Qué significa el ejército chino".

Como simple espectador observando los desfiles militares chinos, hombres y mujeres, se logra comprender la importancia del inconsciente colectivo confuciano. A diferencia de la filosofía militar norteamericana del "hombre imaginario" junto al significado "espartano". Para mejor explicación la profunda diferencia entre la "guerra de todo el pueblo" vis a vis "Westmoreland". En ese orden, la "comuna" tiene su importancia vital.

Otra de las variables podría ser las diferencias entre la "lógica formal" vis a vis la "dialéctica" como, por añadidura, la "trascendencia" lo que hace de un soldado chino su capacidad de afrontar la muerte.

Regresemos al "deseado Donald". Un sector de la sociedad norteamericana (nada que ver con las derechas globales) desea un Trump que solucione problemas sociales, económicos y les entregue una razón de vida, es decir, una esperanza, cual se perdió cuando el significado del "american way of life" dejó de pertenecer a la cotidianidad del pueblo norteamericano. El decir ni el himno ni la bandera serán suficientes: la modernidad tecnológica. Un pueblo no puede permanecer sumido en un "sueño inalcanzable", una "falsa esperanza", en frases cortas y repetidas; la alienación no es suficiente, para expresarlo en frase nazi-fascistoides: "el comunismo".

Por último, nos preguntamos cómo serán las relaciones Trump-Maduro.

Ya el "camarada Donald" (ya existe la confianza) nos envió el mensaje que va a expulsar a todos los y las venezolanas de regreso a Venezuela. "A correr que llegó la "migra" tocando puertas".

Nicolás Maduro Moros, hombre de Estado, hijo del Comandante Chávez, se encuentra "tranquilo y sin nervios". Unos pa´cá, otros pa´llá. "A Madrid me voy".

En el llano criollo se mata un becerro, unas cajas de cerveza y a conversar.

UNIDAD, LUCHA, BATALLA, VICTORIA.