¡Qué tal, camarada!
Buscándole la vuelta a cómo centrar el proceso revolucionario en
informar,
y espero me acompañen en este planteamiento. ¡Sólo eso!
Todos hemos expuesto
que no contamos con una política comunicacional efectiva, si es que
existe.
Siguen pasando ministros,
tremendos camaradas, pero pareciese –o estamos seguros– que no han
logrado conformar equipos integrales y, mucho menos, presentar una seria
y constante manera de transmitir logros revolucionarios.
El presidente Chávez
entiende que no se está mostrando ni un porcentual de todo lo importante
que ejecuta, no hay suficiente y eficiente capacidad para difundirlo.
Muchas veces l@s Ministr@ de Información hasta son premiados formando
parte de comitivas presidenciales a otros países.
Pudiese ser una vez y
para captar el sentido y la proyección de nuestras bondades y planes,
y para los que no estén en el fogueo político.
Y ahí queda…
con una respuesta espasmódica, sin política comunicacional.
Creemos que Chávez por
fin descubrió un sistema de comunicación directo con todos, buenos
y malos, y anda emocionado con lo del twitter. Para dar respuesta a
tantas cosas ha creado un equipo. Lástima que no lo hizo desde que
hace años venimos proponiendo, empezando porque estuviesen pendientes
de leer las proposiciones, reclamos, etc., hechos por estas valiosísimas
páginas virtuales.
Bien. Con “cuarentipíco”
tristes años de la anquilosada democracia bobalicona, perdidos en la
formación integral del venezolano, quisiéramos que los dinámicos
de nuestro esfuerzo, que formaría parte de esa política informativa,
lograran cambiar el país desde las raíces.
Y para que sea radical
tiene que modificar nuestra manera de pensar. Y como será muy difícil
cambiar viejas mentes esperamos que sí esté ocurriendo en nuestra
revolución educativa escolar y de la secundaria, principal punto de
partida para todo, pienso.
Fíjate, camarada, y
lo expuse recientemente, por emergencias hemos iniciado campañas de
ahorro de agua y energía. Ahora, en el campo de la salud, o sanitario,
aparecen potenciados el dengue y el mal de chagas.
¿Tendremos que esperar
que aparezcan otras emergencias para iniciarlas?
Y para la formación
integral, ¿dónde están las políticas ideologizantes para ser un
buen ciudadano? Un buen vecino. Hasta ser más solidarios que ante una
tragedia, ata las internacionales, donde nos damos el lujo de
demostrarlo
con creces.
Eso por esa parte. ¿Y
la política informativa de los logros revolucionarios? Los de Chávez,
me refiero. Porque a niveles regionales y municipales todo mundo se
pregunta: ¿Dónde está la revolución?
Salga a la calle,
camarada,
sin apasionamiento revolucionario o chavista, y dígame cómo puede
un ciudadano común sentir la Revolución.
¿Quién supervisa a
los gobernadores y a los alcaldes y demás funcionarios? ¿Cuáles son
los planes, los programas? ¿Dónde está el empoderamiento del pueblo,
etcétera? Por el contrario, siguen l@s veinteocher@s franelas y gorras
rojas-rojitas.
Quienes andamos en la
calle, los que tenemos contacto diario con personajes comunes, tenemos
que calarnos los “descuidos” de los que sí está llena la cotidianidad
de ciudades y pueblos.
Calarnos las críticas
sin culpa nuestra propia. Y cada vez son más fuertes.
Sólo medio pataleando
por logros nacionales.
Por eso los
revolucionarios
estamos cazando las intervenciones del presidente Chávez, los viajes,
las inauguraciones, los Aló Presidente, para reforzarnos
revolucionariamente.
¡Gracias, presidente!
Para conocer avances
podemos ver programas muy interesantes que transmiten VTV –que
deberíamos
cambiar de canal de todos los venezolanos para canal del estado y nos
quitamos la pendejada de que abusamos de su programación, haciéndola
solamente oficialista– y TVES, pero en horarios “invisibles”.
Si tiene algún valor que yo lo haga, felicito al Lic. Castillo por
la excelente programación de TVES, pasa a ser un canal del cual no
provoca cambiar a otro.
Puedo mencionar “Noticias
Agrarias”, que muestra los éxitos, emocionantes los más, en
ese campo, ah, pero los sábados a las 6 a.m., que comenté en anterior
este artículo, ahora he visto que lo transmiten en horarios de la tarde.
Los domingos el tremendo
programa “Semillas y Senderos”, que nos deja boquiabiertos por los
avances en la producción agropecuaria, avícola, piscícola, etc.,
ah, pero a las 6 a.m.
Si los logros no los
conocen la mayoría de los revolucionarios qué podemos, entonces, pensar
de los del equipo del escualidismo.
Habría, pienso yo, que
cambiar los horarios. Estos son programas estelares. De logros, de
alcances,
de esfuerzos, de éxitos. Los referidos a la información política
son buenos. Nos encantan, pero considero importante –también importante–
dar a conocer los avances de nuestra revolución en esos campos.
Consideramos conveniente,
porque somos muchos los que así opinamos, programar unas cadenas con
esa información. Cadenas permanentes cortas pero como la gotica de
agua permanente. Sí hay pataleo escuálido saquemos una ley de
información
pública.
No pueden pretender los
contrarrevolucionarios que el país que estamos construyendo con tantos
esfuerzos y con éxito –aún los pelones- no debe ser conocido sino
por los chavistas, y, en su defecto, seguir echándole mierda.
Todos los venezolanos
deben participar de la información de la maravillosa obra
revolucionaria.
En especial los jóvenes. Habrá que crear sistemas audiovisuales para
los institutos educacionales. Por lo menos, o por lo más.
¡Gústele o no a los
escuálidos! Estamos hartos de ocultar por negligencia y sólo medio
replicar. Debemos ser agresivos.
¡Vamos a hacer una
revolución
o no! La timidez nos está jodiendo.
Vuelvo con una especie
de utopía personal: ordenar en los medios radiales y en especial los
televisivos para que sus programaciones de noticias, todas, sean
generadas
por ellos mismos dándole mayor empleo a periodistas.
Con ello podemos prohibir
la lectura de periódicos mostrándolos, bien directos del papel o de
las páginas de internet. El que quiera verlos que compre sus periódicos,
pero no podemos calarnos toda esa diarrea de información falsa,
tendenciosa,
o exagerando problemas que nos muestran a toditos, amaneciendo, o
cerrando
las noches.
Vainas vomitivas como
Tal Cual, el Nuevo País y pare usted de enfermar, que nadie compra
ni por urgencias sanitarias de carretera, nos las calamos, tanto los
revolucionarios como, con peor efecto psicológico, los escuálidos
y los ni-nis.
Además, si es necesario
legislar al efecto, aunque la sigan chillando, para que exista un
verdadero
equilibrio informativo, por lo menos en las primeras y últimas páginas.
Por cada defecto, error, que hay por montones (descuidos de mucha gente)
que muestren en fotos o titulares, al lado debe presentarse un logro
de las mismas dimensiones.
Equilibrio informativo. Menos ventajismo visual opositor. Comenzar a medio ganar, aunque sea una batalla, en la inclemente guerra de cuarta generación, que nos están ganando y es lo único que nos perturba nacionalmente.
Por otra parte, debemos
crear programas fijos de los Concejos Comunales que han hecho grandes
progresos.
Siguiendo con los medios
de comunicación. En el dial del radio del carro mantengo a Radio
Nacional,
tanto el canal normal como el cultural. A primeras horas de la mañana
ambos cuentan con valiosos programas de opinión. Luego en el clásico
colocan conciertos clásicos completos -que son extraordinarios- y el
resto del día se inserta algunas otras informaciones.
En esta época de guerra
mediática arrecha considero, humildemente, que debemos aprovechar los
horarios diurnos, los mejores, para ahondar en concientización, en
información. Y disfrutar de una excelente música en las noches.
Por cierto, que ocurre con la transmisión de música venezolana. Siempre en las mañanas y sólo la llanera. Se requieren horarios estelares obligatorios en todas las emisoras. Aunque sean cortos.
Deseamos escuchar
programas
de las comunidades. Sin muchos moderadores estrellas. Ellos mismos y
sus avances. Participación de programas seleccionados de las emisoras
comunitarias.
A veces he escuchado
programas infantiles que habrá que evaluar su raiting. En VTV
y TVES hay unos excelentes pero amaneciendo los sábados. Como son muy
didácticos sugiero sea obligatorio colocarlos en horario estelar
infantil,
en las tardes, y que sean para evaluación en los colegios.
Quisiéramos escuchar
o ver programas nacionales con voces de la Provincia. Y no de llamadas,
sino de producción provincial.
Hay globoterrores con
programas hasta insultantes. Llenos de mentiras. Si usted invita a
alguien y miente, deben ser penalizados ambos, entrevistador y
entrevistado,
y tal vez el productor y el director del programa. Se ha avanzado un
poquito, peo con fallas en las acusaciones. Los abogados defensores
se lucen y nos hacen quedar muy mal parados.
Hay una cadena provincial
“R” que desde Barquisimeto nos envía un programa radial televisado,
desde un estudio de radio. Es una manera muy torpe de hacer televisión.
Es de un periodista –que por el ventajismo mediático de todos
es candidato a diputado- con una joven que lo que hacen es leer los
periódicos, incluso de internet, y analizarlos según sus criterios
estrechos. Con una burlita a todo.
A veces repiten, sin
asegurarse de la veracidad de todos los mensajitos de texto que
les llegan. Que recuerde uno de esta semana: “En Guanare el gobernador
y la alcaldesa sólo están pendientes de caballos y gallos” ¿No
es una infamia?
Además, que les paren
bolas a los mensajes enviados en los cintillos a todos nuestros
programas
de opinión, donde los permiten. Terminan leyéndolo sólo los que los
envían. Especies de diálogos entre unos y otros mensajetexteros.
El mismo equipo de 200 para el twiterismo.
No hay respuestas. Es
una falta de respeto.
Insistimos en que se
den charlas semanales sobre proyectos, obras (que desconocen hasta de
los mismos institutos), capitalismo vs. Socialismo, etc., en todas las
oficinas de gobierno. Obligatorio para todos los funcionarios (más
del 60% son escuálidos, escuálidos lights y ni-nis, quienes sólo
cumplen con lo básico de sus funciones)
Queremos escuchar a los
directores de gobernaciones, y de las alcaldías, del proceso, claro,
conversando, dictando charlas a sus empleados, sobre esos temas
revolucionarios.
Incluye a gobernadores
y alcaldes. No se les escucha nunca. Menos cuando andan de visitas en
centros comerciales, en espacios de reuniones. La revolución debe ir
por delante.
Sin miedo. ¿Queremos
cambiar mentalidades? Bueno, a echarle bolas. Que no estarán de acuerdo,
que es ideologización, discutámoslo también.
Que se escuche vibrar
la Revolución en las comunidades. Queremos debates. Calle pareja.
Megáfonos.
Hay que darle un
revolcón
a muchos. Chavistas inclusive.
Como será que la
mayoría de los funcionarios de vaina sí se ponen las gorras y franelas
rojas en manifestaciones o mítines para que los vean los jefes y
revolucionarios.
Les da pena con los vecinos. Con los de las panaderías donde compran.
Hasta con los compañeros de trabajo porque son escuálidos y quieren
respetarlos.
A la inteligente ministra
Tania Díaz, por favor, con el debido respeto a una gran dama que no
queremos se la trague la falta de una visión comunicacional integral,
considero lo más conveniente que haga una encuesta nacional que la
apoye para hacer una real y firme política informativa del gobierno.
Que esté en cada rinconcito de las oficinas públicas informando.
Una política
participativa
y protagónica. Todos tenemos alguito que aportar.
Que se aguanten nuestra fortaleza. Revolución o pelazón. Vencemos o perdemos. Obligatorio es cambiar.
edopasev@hotmail.com