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Nuestra economía, es
capitalista, generadora de plusvalía, mono productora, rentista,
excluyente,
basada en subvenciones, créditos blandos, subsidios. Una economía
con estas características no tiene mucho que ofrecer a una población
que crece cada vez más. Una población que busca satisfacer sus
necesidades
básicas y algo más. El sistema económico venezolano esta enmarcado
en lo que llamaron “Prototipo de Economía Periférica”, la concentración
de industrias en un solo eje, fue el resultado de la mala planificación
que hicieron quien gobernaron al país en el siglo pasado. Esto hizo
que un gran sector de población fuera excluido del sistema de
producción,
teniendo que trasladarse de su sitio de origen a otros sitios, formando
cordones de miseria en las zonas aledañas a los espacios industriales.
La Revolución ha tratado de voltear esta situación, aun todavía en
pañales, pero se han hecho cambios importantes. Quienes quieren volver
y son genuinos representantes de aquellos que por falta de compromiso
con el país, copiaron modelos económicos que solo aceptaba la
participación
de grupos poblacionales del centro del país no han cambiado de
pensamiento.
Nuestra economía debe ser planificada de acuerdo con las necesidades
prioritarias de las regiones, diversificada según las características
estaciónales, de vegetación, suelos, educación etcétera. No podemos
seguir con el modelo caduco y oxidado de la IV republica, que
lamentablemente
aun tenemos. Quienes sean nuestros voceros en la AN, deben procurar
hacer las leyes necesarias para deslastrarnos de una vez por toda de
la economía capitalista, quitarnos esa mano vieja y arrugada del mercado
que nos aprieta y asfixia desde hace décadas. Hacer añicos a Adam
Smith, y a sus seguidores Clásicos, fomentar el estudio de la economía
política, con visión de modernidad, de solidaridad, solo así estaremos
dando un salto cualitativo y cuantitativo en procura de un sistema
socialista
y verdaderamente democrático.
Para concluir; vemos
como los obreros del Grupo Polar se apegan a las faldas de sus patronos,
dan su apoyo a los que por naturaleza les explota, exfolia y los
utilizan
para sus fines golpistas. Nunca entenderemos porque la clase obrera
venezolana ha perdido su identidad con los mas empobrecidos por el gran
capital. El obrero venezolano se presta y practica acciones
desestabilizadoras
como el remarcaje de precios, el acaparamiento voluntario, participa
en la merma de la producción establecida por los patronos para crear
desabastecimiento. Cuando llegara el día que el obrero venezolano tome
conciencia, que la explotación del pueblo es también su propia
explotación...
es ahora o nunca.
Saludos cordiales, RAS, Siglo XXI
venezuelaeconomicaypolitica.blogspot.com