Cuando hablamos sobre el tema de las audiencias y las asimetrías mediáticas con algunos compatriotas vinculados a los medios observamos, en muchos de nosotros, la predisposición a subestimar los números y preferencias de las audiencias: niegan con ¡intimidatoria seguridad! que exista la segmentación de las audiencias. Un amigo sentenció: “ese mito de los números y las audiencias fue derrotado el 12 y 13 de abril de 2002”
Para hacer reflexionar sobre, lo que considero una debilidad en el análisis-diagnostico, suelo preguntar: ¿la movilización del 11 de abril fue espontánea? El efecto emocional y colectivo de la oposición traducido en odio y discriminación hacia el pueblo “chavista” ¿surgió de la nada o fue provocado, exacerbado por los medios? ¿Los medios opositores lograron su objetivo el 11 de abril?¿Sabían que la campaña que adelantó Cedice para activar el reflejo condicionado anticomunista y contra la reforma constitucional: “la Reforma traerá pobreza”, “te quitarán tu casa”, “te quitarán tu panadería”, “el Estado te quitará tus hijos”, etc., nunca fue transmitida por el Sistema Nacional de Medios Públicos?
Si negáramos el papel decisivo de los medios de la burguesía en la desmovilización -¿miedo?- del “chavismo” y “derrota” en el referéndum por la reforma constitucional de 2007 pecaríamos de infantilismo político y comunicacionalEstamos obligados al rediseño de la estrategia comunicacional y una revisión táctica del SNMP para afrontar los retos de 2012
«La pedagogía del oprimido, como pedagogía humanista y liberadora tendrá, pues, dos momentos distintos aunque interrelacionados. El primero, en el cual los oprimidos van desvelando el mundo de la opresión y se van comprometiendo, en la praxis, con su transformación, y, el segundo, en que, una vez transformada la realidad opresora, esta pedagogía deja de ser del oprimido y pasa a ser la pedagogía de los hombres en proceso de permanente liberación» Paulo Freire --