Me entristeció sobremanera el resultado de una conversación con un colega amigo. Sabía de su escualidismo crónico. Pero nunca pensé que su enfermedad de antichavista había hecho metástasis. Lo que brotó de su boca fue puro veneno.
No menciono su nombre por respeto a su honorable familia y, en el fondo, por respeto a su trayectoria como periodista. Noble oficio que, aun cargado de años, sigue ejerciendo.
En su drenaje verborreíco de cosas malas en contra del Presidente reelecto llegó a calificar de ignorantes y chaviburros a los más de ocho millones que lo reeligieron el pasado siete de octubre. Y de calificar a los que votaron por Capriles de conscientes, democráticos y ser lo “mejor del mundo”. Oyéndolo sentí pena. No es posible que el fanatismo, que la disociación sicótica dañe de tal manera a un ser humano.
La conversación tuvo lugar en un conocido establecimiento de Lechería donde acude la “crema y nata” del escualidismo de la zona metropolitana de Anzoátegui. Tanto que la denomino Plaza Altamira II. Por supuesto que la tristeza y el traumatismo post electoral de esta gente son de marca mayor. Y todo pasa porque ellos hicieron de esa elección una cuestión de vida. Si gana Chávez, me muero. Si pierde Chávez, estoy vivo. Siendo que esa victoria estaba cantada desde hacía rato. Lo malo fue que la Canalla Mediática les sembró en sus mentes que Capriles Ganaba.
Pero prosigo con el colega quien, amargado por la victoria de Chávez, osó decir que el Mercal, Pdval, Barrio Adentro, son dádivas, que no funcionan y que Radonski se equivocó al darle credibilidad a esas misiones. “Cómo el pueblo venezolano, dijo, va a ser tan ignorante para votar por Chávez”.
-“Pero eso no es lo peor según tu maltratado cerebro, según tu descarriada óptica, le riposté. Lo arrecho es que ustedes magnificaron los problemas de las cárceles culpando a Chávez y resulta que éste ganó las elecciones en todas las cárceles. Y eso pasa porque los presos nunca han creído que Chávez es el culpable de sus males”.
-“Debe ser, dijo, que a los presos, les encanta pasar trabajo”.
El grado de deterioro mental de mi amigo y colega es de tal magnitud que le recomendé que se viera con un siquiatra cuando me aseguró a todo gañote que Chávez ganó porque al CNE le dio su perrísima gana y que lo que dijo Carter sobre que el CNE es el mejor sistema electoral del mundo, incluso por encima del de USA, es porque el ex presidente estadounidense está en grado senil. ¡¡¡¡¡Coño coleguita! A Usted le sale catarsis ya!!!!
Al despedirnos le dije. “La próxima vez hablaremos de margariteñerías, de la prosa relancina i y de la prosa de pie cortado de los envidiosos hermanos de los poetas relancinos”.
TINTERO. Cuarteta relancina
Un decimista relancino residenciado en Pampatar, que tuvo amores con una meretriz en Pampatar, La Camioneta, le compuso esta mordaz cuarteta relancina al enterarse que su novia y su hermano el Autobús habían decidido irse a Puerto La Cruz por falta de clientes en Margarita:
Adiós Camioneta mía,
hermana del Autobús.
Te vas pa Puerto La Cruz
a seguir la putería
americoarcadio@yahoo.com
