Entrañables camaradas y amigas
Quiero hacerles llegar mis parabienes en calidad de "corresponsal" autodesignado en Buenos Aires.
Hay un tango que dice "veinte años no es nada", refiriéndose a lo volátil del tiempo en el amor. Si eso fuera así en uno de los sentimientos humanos, qué comparaciòn hacer de los cuatro añitos de vida de ustedes.
Carajo, es muy poco tiempo para tantos acontecimientos reflejados en las pantallas de Aporrea. Esa quizá sea una de las diferencias entre los procesos políticos y el amor. Los primeros se arremolinan con desespero en tiempos muy cortos. El otro puede languidecer en un tiempo inofensivamente inconmensurable.
Escuché con placer los audios publicados días atrás donde Martín y Gonzalo cuentan el cuento del invento de Aporrea, es sorprendente tal derroche de acción e inteligencia política en tan poco tiempo. Los errores, tanto como los aciertos, son las dos fuentes constitutivas de la construcciòn de Aporrea.
Uno de los detalles que sorprenden del proceso revolucionario de Venezuela, es su amplia democracia. Esto es visible con fuerza en su prensa comunitaria (o alternativa). Ya el nombre que se usa en Venezuela, "comunitaria", es un signo social y político distintivo. Singifica que Aporrea, como los otros medios de ANMCLA, son parte orgánica del proceso, no aleatoria, ni externa.
Ustedes superaron, sin proponérselo, uno de los escollos de la militancia revolucionaria del siglo XX, originado en una deformaciòn del marxismo alemán de finales del XIX: la exportaciòn mecánica de las ideas al movimiento de masas. Información es idea, ideología en su forma masiva y mediática. Ustedes, y otros medios revolucionarios de Venezuela, lograron la síntesis entre medio e información.
Hace unos meses en Buenos Aires escuché embebido a Blanca Ekhout relatar esa simbiósis, aunque no se ocupó en definirla teóricamente. No importa.
Ustedes son uno de los 5 o 6 medios alternativos más exitosos, de los centenares aparecidos entre mediados de 2001 y 2002, porque como los otros, son la expresiòn de uno de los momentos más fulgurantes de luchas revolucionarias de las últimas dos décadas.
Representan una avanzada, una vanguardia mediática en el continente. Lo importante, lo más importante (y con esto Aporrea estaría justificada ante la historia) es que ustedes son parte de la contruccion colectiva de una nueva opinión pública en Venezuela. Sin ella, el tren de la revoluciòn no avanzará por el camino correcto y si da algunos pasos, retrocederá otros más hasta el riesgo de descarrilamiento.
Ninguna revolución avanzó y se consolidó sin su propia opinión pública. Esa es vuestra obra.
Un grande abrazo a Martín, Gonzalo, Miguel, Greti, Iván y los demás.
Modesto Emilio Guerrero/Corresponsal.
Buenos Aires