¡A buena hora! Bajo el amparo de las leyes nacionales, y la razón, el gobierno decidió sacar del espectro radioeléctrico público -valga decir, que sigue dominado por las cableras privadas nacionales y extranjeras- a una cadena de noticias mercenaria que tanto daño ha hecho a nuestro país y a muchos otros pueblos en el mundo. Por más de 16 años, y sin interrupción, la cadena CNN en español se ha dedicado a mentir y conspirar contra el gobierno venezolano para servir a los planes golpistas de Estados Unidos y sus lacayos políticos.
La primera víctima de la guerra informativa contra Venezuela ha sido siempre la verdad. La pericia en éste tipo de guerra tiene su mentor. ¿Quién puede contradecir que CNN ha destacado entre los mejores alumnos del ex ministro de propaganda nazi Joseph Goebbels, quien dijo "una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad"?
El último falso positivo repetido mil veces por esa cadena estadounidense, no ha sido más que un refrito del mismo intento fracasado por vincular al gobierno del Comandante Chávez con el terrorismo y el narcotráfico. Hoy vuelve contra el Presidente Nicolas Maduro y su Vicepresidente Tarek Al Eisami.
Ya muchos estamos inoculados contra la rabia y frustración de las corporaciones privadas que utilizan la desinformación y las mentiras para justificar más sanciones económicas contra el país, y de ser posible, provocar una intervención militar estadounidense que termine por derrocar al gobierno venezolano.
Pero las mentiras tienen patas cortas y caen también por su propio peso. Bastaría con que las mentes inteligentes que son muchas en el mundo, se pregunten:
¿Por qué Colombia sigue siendo el mayor productor mundial de cocaina, pese a la existencia de bases militares estadounidenses y la DEA en su territorio? ¿Por qué la DEA no logra detener la producción de drogras en Colombia y al narcotrafico dentro de EE.UU.? ¿Cómo es posible que Tarek Al Eisami, entonces Ministro de Interior y Justicia que más narcotraficantes capturó y deportó a EE.UU., hoy resulte implicado con el narcotráfico? ¿A quién conviene que esta farsa sea creída? ¿Qué utilidad tendrían los pasaportes venezolanos para el Hezballah si estos no sirven para entrar libremente a EE.UU.? ¿Quiénes realmente crearon y siguen financiando a los terroristas en Medio Oriente y Quiénes realmente luchan contra esos demonios en aquella región? Hezbollah no es un grupo terrorista, ellos luchan contra el terrorismo wahabita.
