Caracas, 14 de julio de 2007
Licenciado
José Luis Mazzarri
Director del diario El Tiempo
Estado Trujillo
Su despacho.
Con suma preocupación me dirijo a usted para protestar, y a la vez solicitar el ejercicio de mi derecho constitucional a la réplica, ante la tergiversación de mi discurso en la sesión solemne del Consejo Legislativo del Estado Trujillo con motivo de la celebración del Día Nacional del Periodista.
A esta fecha no he podido leer la versión impresa de El Tiempo, pero en su versión digital pude constatar con sorpresa e indignación que fueron colocadas en mi boca palabras que jamás pronuncié.
Se me atribuye haber afirmado que “lo más importante es sólo trabajar por la unidad y la reconciliación nacional sin caer en la trampa del juego divisionista”, algo que puede sonar bonito, pero que yo nunca dije, aunque El Tiempo lo coloque entre comillas, como si fuera transcripción fiel de mi discurso. Por fortuna, el Consejo Legislativo hizo una grabación donde puede constatarse si mi reclamo tiene o no fundamento.
Esta manipulación no me parece nada inocente, pues todo el mundo sabe que lo que se me atribuye haber dicho es una copia al calco del discurso que por estos tiempos viene adoptando la oposición antichavista venezolana, de cuyas consignas, intereses, políticas, propósitos y métodos me cuido de marcar distancia, pues no me merecen la más mínima credibilidad.
Unidad y reconciliación son bellas palabras cuando hablamos de la gente común, de las familias y los ciudadanos, pero no cuando se usan para favorecer la unidad y la reconciliación con viejos o nuevos factores de poder que sólo buscan rescatar o preservar sus privilegios, y bloquear la construcción de una sociedad igualitaria, justa, independiente y realmente libre, como la soñó Simón Bolívar. En boca de ellos es una trampa caza bobos, en la que no deseo caer y mucho menos que otro me atribuya andar promoviendo.
Es una lástima que precisamente cuando conmemorábamos el Día del Periodista se haya producido tan burda manipulación, reñida con el Código de Ética del Periodista.
Me llama la atención que en Internet aparecen dos notas reseñando mi discurso: una firmada por la periodista Glicely Linares, a la que no hago objeciones, y otra sin firma alguna, donde están recogidas las palabras falsamente atribuidas a mi persona.
A la espera de que esta carta sea publicada en la próxima edición de El Tiempo, con la misma ubicación y despliegue de la nota objetada, en cumplimiento del Derecho a Réplica consagrado en nuestra Constitución, quedo de usted,
Atentamente,
Ernesto Villegas
Periodista
ernestocorreo@yahoo.es
