Ahora viene con el cuentote de que a su cuadra de periodistas el gobierno le está sacando la lengua en las marchas y los fisgonea cada vez que las humildes muchachitas y muchachitos van a hacer pipí en los baños públicos. ¡Qué vaina es esa, señor que reina en el cielo y parte de la tierra! Jamás un caso de tan execrable ridiculez había llegado a la palestra pública, ni se había conocido en ninguna sociedad del mundo, tal muestra de CINISMO Ravell es el hombre más estúpido que existe en el orbe y parte del cosmos, incluido aquel que vivió con su hija por décadas, por allá, por unos de esos grandes países culturales.
Con el mayor desparpajo, sin penas ni temores, el sigüí de marras denuncia ante sus amigos de la Comisión de Derechos Humanos, que el gobierno venezolano irrespeta el derecho a la vida en Venezuela…”estas son las cosas que hacen que un hombre de la más humilde vivencia se convierta en un energúmeno”, me confesó hace apoco un congénere por el centro de Caracas, y yo le contesté: “tranquilo, tranquilo…”
Globovisión lleva diez años aterrorizando a los 7 millones y medios de venezolanos que han votado por Chávez en distintas oportunidades; Globovisión fue la cabeza principal en el GOLPE DE ESTADO CONTRA CHÁVEZ Y EL PUEBLO. Desde los estudios de Globovisión se han lanzado toda clase de ofensas, amenazas, burlas, racismo, segregación, contra los 7 millones y medios de venezolanos que ha votado por Chávez durante diez años. Eso es atentar contra la humanidad que piensa y quiere un sistema de gobierno socialista. Los muertos de puente Llaquno, los envolvió Globovisión y las otras estaciones televisivas, que izaban la bandera del odio, del vandalismo, contra un gobierno electo democráticamente. Globovisión, al igual que los oficiales que salieron en el vídeo, tenía que saber cuantos muertos y heridos se contaban, como igualmente aquella infeliz noche de plaza Altamira con Gouveia, cuando terminando de sonar el último disparo y ya el reportero de Globovisión estaba en el terreno de los acontecimientos. ¿Por qué ALBERTO FEDERICO RAVELL CREE QUE EL PUEBLO ES IDIOTA?
Ahora este hombrecito disfrazado de uno de los 7 enanitos de Blanca Nieves, envía a su hueste de “actores” mediáticos a que hagan el más triste de los papeles que ser humano puede representar: el de mentir para causar lástima, para engrandecer sus odios, para calumniar al país donde nacieron, para seguirle el juego al estado imperialista en su innoble afán de dar al traste con el proyecto de unidad latinoamericana encabezado por el HUMANISTA Hugo Chávez Frías. El pueblo no traiciona y estará ojo avizor ante esta sarta de desmanes, producidos por un ser, que no tiene un minuto para el descanso y la paz, arrastrando en su infernal locura a sus trabajadores, que evidentemente han perdido la brújula y la ética-
El pueblo venezolana está asombrado. Ahora resulta que los conejos andan detrás de los cazadores. Ojalá pudiéramos tener aunque sea un poquito de tranquilidad espiritual, para no caer en la indignación, que es evidente cuando se palpa, se siente, se toca, la enfermiza alma de un ser envenenado por la cicuta del odio, como lo es ALBERTO FEDERICO RAVELL. GLOBOVISIÓN es un astro de perversidades, que no entendemos, por qué convierte a hombres, hasta ayer gallardos, buena gente y ejemplares, en cabilleros, en enfermos, en atorrantes, en burlones y pedigüeños. Los mismo pasa con sus periodistas. Vaya usted al barrio más escondido de Caracas o al mismo centro de la ciudad y pregúntele a cualquiera que piensa de Carla Angola, de Nitu Pérez Osuna, de Matacuras, de Kiko, de Roland Carreño ¿Es esa rabia del pueblo la que dice Alberto Federico Ravell le tiene el gobierno a sus trabajadores? Alberto Federico Ravell es el culpable de lo que piensa la gente respecto a los que trabajan en GLOBOVISION. No es, pues, culpa del gobierno esa actitud de las masas. El gobierno ha dado seguridad a todos por igual, ¿No recuerda Alberto Federico Ravell de su accionar violento contra Boris Castellanos, cuando este apenas era un pasante en VTV?
No es el gobierno representado por Chávez, el que podría hostigar a nadie. Todos conocen el alto sentido de humanismo en Chávez. En él jamás alguien encontrará la espada que asesina ni la bala que se asoma desde un hotel para masacrar al pueblo. De eso da fe el soberano. Alberto Federico Ravell y su combo de ególatras cavernarios, ¿dónde estaban el 13 de abril de 2002?
Por eso parece muy ambigua y ridícula la pretensión de ALBERTO FEDERICO RAVELL de llevar al Estado venezolano a semejante desparpajo internacional, cuya inconsistencia, debilidad y falta de coherencia, no cabe duda quedará en la historia de las deformaciones mediáticas como algo torpe, ridículo, falto de seriedad y estúpido.
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