Eran tiempo donde exclusivamente existían medios de comunicación con tinte de una solo tonalidad, el cual sus informaciones ostentaban códigos mentales para manipular a las sociedades sigilosamente; grandes medios de noticias solapaban cínicamente las realidades de los pueblos, golpes de estados fraguados desde la cúpula imperialista de EE.UU propios fabricadores de nuevos gobiernos usurpadores, Nación con el mayor índice de genocidio concebido en contra de los pueblos que han establecidos gobiernos democráticos y constitucionales; muy bien lo señala la historia en Guatemala con Jacobo Árbenz, cuando éste fue derrocado a través de un Golpe de Estado planeado por la Agencia Central de Inteligencia (CIA central intelligence agency) en 1954, las razones de Jacobo era convertir en Guatemala de una nación dependiente y de economía semicolonial, a un país económicamente independiente; su mayor proyecto, la Reforma Agraria o muy bien como era conocida el “Decreto 900”, con ella evitaría el sostenimiento y surgimiento de latifundios o minifundios, pues a esto, la famosa United Fruit Company no le parecía nada bueno, es allí donde iniciaba la carrera conspirativa contra el Pueblo de Guatemala; grandes terratenientes y la iglesia fueron coautores y títeres del Gobierno de los Estados Unidos. En 1979 germina la Revolución Sandinista en Nicaragua, sublevación motivada por los crueles abusos en contra del Pueblo nicaragüense promovidos por la familia Somoza y respaldado por EE.UU cuyas muertes se calculan en más de 100.000 personas; el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) conformado en gobierno comenzó con una política de economía mixta, le repartieron al Pueblo las tierras de los latifundistas mediante una reforma agraria, hubo la nacionalización de la banca; los bienes de la familia Somoza fueron expropiados, estos correspondían al 40% de la riqueza nacional, los embargos se realizaron mediante el Decreto número 3; todo ello dio origen en preparar desde los EE.UU el financiamiento para derroca al Gobierno Nicaragüense mediante los famosos “Contras”, el brazo armado de la oposición y con bases en Honduras y Costa Rica. Todo éste epílogo histórico solemos verlo de manera impasible, por generar distorsiones en las mentes mediantes los códigos que trasmiten los grandes medios de comunicaciones a través de las televisoras, radios y medios impresos, juntos manipulando las sociedades de acuerdo a las ganancias excesivas de sus grandes capitales, conexas entre industrias de distintos procesos y actividades; como ejemplo de ello, señalaremos la cadena CNN, una televisora que ha sabido manipular las noticias en el Mundo, cuando de manera incisiva transforma la “verdad” subjetiva en una verdad “objetiva”; estos dueños tienen vínculos económico y familiares con las grandes empresas bélicas, alimenticias y de telecomunicaciones, etc.; Personas que han alcanzado estos estatus a través del Poder Político y Militar, un solo cinturón económico en el Mundo llamado “Globalización” para dominar los pueblos.
Querido lectores analíticos, TELESUR ha nacido en Latinoamérica para desmontar las mentiras de la Oligarquía internacional, donde han utilizado los grandes medios de comunicación que por mucho tiempo codificó mentalmente a la sociedad para aceptar golpes de estados contra los gobiernos democráticos y constitucionales, y cruel aún, genocidios cometidos contra pueblos de nuestras naciones, muy bien los reseña el palangrismo comunicacional CNN hacia América o la BBC en Europa, y no es que únicamente existan estos dos nauseados medios, sino que también detrás de ellos coexisten una larga hilera de medios apátridas por cada Nación; ejemplo en Venezuela, Globovisión, un medio que en vez de informar enferma a la ciudadanía. Pero como dice una canción de Carlos Puebla pero modificando ciertas palabras: “se acabó la diversión, llegó Telesur y mandó a informar”. TELESUR ha iniciado una admirable carrera ética en lo que se refiere a la información veraz, oportuna y objetiva de las situaciones y realidades del acontecer mundial en “pleno desarrollo”, para combatir el cerco mediático, descodificando las trasmisiones informativas Goebbeliana; un equipo de profesionales al frente de las cámaras telesureñas, como muy bien lo demuestra la periodista Adriana Sívori, Larry Sánchez camarógrafo y María José Díaz; a su vez, el periodista Abraham Istillarte, todos ellos poseedores de una conducta informativa ecuánime, y rescatadores de los valores del periodismo en una era donde ya se había dado por perdida.
(*) Estudiante de Estudios Jurídicos de la UBV/
carlosg2021@yahoo.com