En Dictadura mediática en Venezuela. Investigación de unos medios por encima de toda sospecha, de la colección Análisis, del Minci, Luis Britto García (LBG) hace un estudio del papel que han tenido los medios en el golpe de Estado del 11 de abril hasta el presente aquí en territorio venezolano.
Con su título atribuido a los medios de por encima de toda sospecha, LBG hace una analogía de un filme de los sesenta, Investigación de un ciudadano por encima de toda sospecha, en el cual se aborda el caso siquiátrico de un jefe de la policía, del Departamento de Homicidios, que mata a su amante para probar que puede cometer impunemente un delito sin ser enjuiciado a pesar de que él incita a su propia detección.
A pesar de lo anterior, debido al enfrentamiento de poderes, el que representa por su cargo y los que no se atreven a arremeter contra este funcionario por su jerarquía, el director policial no es llevado a la cárcel. No obstante, en medio de su perturbación mental, el asesino confiesa su crimen, y así se demuestra que la ley no puede estar por encima de toda sospecha.
LBG señala que el siglo XXI se inicia con el abandono de las masas a los partidos políticos que en el pasado terminaron abandonadas por ellas; en ese contexto, cuando surge la figura de Chávez en la política, los medios dicen por quién votar, pero, a pesar del poder que detentan, se vuelven incapaces de evitar: Su arribo a la presidencia en 1998; su retorno después de su secuestro el 13 de abril gracias a que el pueblo sale a las calles, y su triunfo en el referendo revocatorio de 2004.
Dos años después del arribo del teniente coronel Hugo Chávez, se fragua un golpe de Estado en que los mass media incitan a la desobediencia mediante mensajes subliminales y directos. Sin embargo, aunque se habla de atentado contra la libertad de expresión, LBG señala que no hay un solo periodista detenido, ni un medio cerrado, ya que el canal Rctv sale del aire por el vencimiento de su concesión en 2007, la cual fue otorgada en 1987 por el presidente de aquel entonces, Jaime Lusinchi, y no por una medida arbitraria del Gobierno actual.
La obra de LBG es una investigación seria en que el autor hace un seguimiento minucioso de todo lo que se publica, sale en la pantalla chica y se difunde por radio antes y después del golpe de Estado y del paro petrolero, en que se demuestra que la opinión no se distancia del hecho noticioso favoreciendo un ambiente en que la insurrección es el germen de lo acaecido el 11/04.
Lo novedoso del texto de LBG que se convierte en una lectura obligada para los interesados en el tema, es que este escritor concluye que aunque los medios son el cuarto poder, éstos pierden capacidad de acción en una población en que los horarios de trabajo no le permiten encerrarse en sus hogares para seguir sus imposiciones, como sí puede ocurrir en los sectores económicamente más privilegiados en que los mass media penetran mejor.
Por lo anterior, la obra de LBG es un trabajo importante para los que desean investigar más sobre el rol de los medios en Venezuela una vez que dicho papel se vuelve atípico cuando éstos asumen una participación política.
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