Este tipo de hombres son como alacranes, nunca dejan su ponzoña en casa, la cargan doquiera vayan, y sí se juntan, entonces se constituyen en un grupo de cuidado. He ahí la MUD-por ejemplo-emblemática a ese respecto.
El “Alacrán” GarCÍA se la echa de sapo rabudo pero la verdad es que la MUD no lo quiere, lo tolera mientras pueda usarlo pero, hasta ahí porque además de su ponzoña es aleve y eso lo saben todos.
En verdad unos y otros se tienen recelo, de conjunto les pega esa que dice: “…el alacrán cran cran el alacrán cran cran / Ay, me va a picar /…/ Mata ese alacrán abuelita / Mátalo con una escopeta / Y si no revienta el cartucho / Mátalo con una chaqueta…”
Mas, en particular, a GarCÍA le pega esa de Javier Solís y que dice así: “Soy malquerido / por la MUDjer / Que yo más quiero / Y esa MUDjer vive conmigo / Queriendo a otros /…”
Y es que la MUD está seriamente averiada porque de lo que se trata es de un sistema de odios y ambiciones personales y eso es grave porque es producto de un viejo y soterrado trabajo imperial.
Antes, los referidos alacranes estuvieron estratégicamente dispersos pero dadas las circunstancias, muchos de ellos fueron reclutados por el imperio y dispuestos como grupo al que denominaron MUD.
Manipular a un objeto no es lo mismo que manipular a un sujeto; tú puedes manipular una tijera o una pistola y a eso se llega de una forma distinta a cuando se trata de sujetos a los que se convierten en animales y es el caso de la MUD.
Las conexiones internas entre alacranes son irracionales aunque coexistan, por eso la MUD no va a poderse sostenerse metiendo coba al pueblo, durante mucho tiempo.
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