A su edad y no ha visto a Linda, parece mentira que un Cardenal, en este caso Urosa Savino, ande tan amargado, diciendo incoherencias.
Eso es producto de aquello, sin dudas que lo es. Un hombre ocioso, sea cual fuere, aquí, en Roma o en Atenas, que ni fu ni fa, no le queda más que hablar sandeces. Helo ahí, tan faramallero y con ínfulas que no le quedan nada bien, al Cardenal Urosa.
Anda como el cometa; ya salió a darle a la sin hueso y cada vez que lo hace evidencia la crisis de la iglesia. Él debería revisarse; no digo hacerse un examen de conciencia porque sería inútil, de la nada nada parece salir pero, al menos, dicho Cardenal debería rezar quinientos: “Yo pecador / me confieso a Dios / es que he pecado / de palabra y de obra / danos tu infierno / así en la Tierra como en el cielo / amén”.
Urosa acusa al gobierno de no controlar la violencia que la iglesia desató en todo el mundo cuando la Inquisición episcopal y que nos invadió desde la llegada de Cristobal Colón a las costas venezolanas con un bojotón de malandros, por sólo considerar los últimos quinientos años.
Los Urosas de entonces quemaban vivos a quienes pensaran distinto a ellos. Y, es que la iglesia en cuyo nombre habla el señor Urosa, parece estar atada a la violencia como a una pared, lúgubre pasado de muerte y sufrimiento del pueblo y eso no se destierra de la noche a la mañana pero, este sujeto no tiene vergüenza para salir con su cara bien lavada a hablar necedades.
Debería darle pena la cantidad de muertes decretada por la MUD durante el golpe de Estado contra el pueblo venezolano, en 2002, y del que él formó y forma parte.
¿Por qué Urosa no habla de la violencia pedófila desatada por su iglesia?
Y, además de la violencia de curas pedófilos, Urosa se hace la vista gorda respecto a la pederastia de algunos curas malévolos. Y, hay que decírselo en dos idiomas-“pedofilorastia”-para ver si se atreve a desmentir una de las dos versiones.
Urosa está deslegitimado para hablar contra la violencia y para que cualquier alto funcionario del gobierno se enfrasque en responderle, quienes deben responderle a ese irresponsable sacerdote es el propio pueblo y mandarlo a lavarse ese paltó. Lo que él anda es buscando camorra para coger prensa pero, que vaya a lavarse ese bicho (y a plancharlo). Le pega esta de Daniel Santos: “Yo no he visto a Linda”.
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