Richard Mardo, Capriles, María Corina, Aveledo y compañía, hicieron su agosto durante la marcha denominada “De los Choros”. La banda de simpatizantes de este grupo de hampones sustrajo a algunos marchantes la bicoca de 30 celulares inteligentes y 45 billeteras y carteras. Era de esperarse el robo de estas propiedades en un ambiente lleno de mafiosos, ladrones y corruptos. Un amigo opositor que vio la marcha desde su casa, indignado me dijo… “Pedro, en lo que se ha convertido la oposición venezolana, en un amasijo de corruptos y descarados, esto se lo llevo quien lo trajo, larga vida a la revolución, me dijo con desdén”. Al amigo opositor para subirle un poco la autoestima y el ánimo, le respondí, que no todos los que hacen vida en la oposición tienen esas prácticas mafiosas. Que solo falta un arresto de valentía para que ese grupo opositor, que no es tan minoritario rompa de una vez por toda con la MUD, que es la cueva de Ali Baba y los 40 ladrones. Mi amigo molesto, me comento que una sobrina de él, perdió su celular inteligente durante la marcha, y ella le comento que tuvo conocimiento de varios robos, entre ellos carteras y billeteras. Las personas afectadas rumorearon su descontento con los organizadores de la marcha, y juraron no seguir este tipo de actividades al aire libre. Mi amigo, me recordó que en la Venezuela de la IV república había un poco más de recato, “Robaban, pero eran más cuidadosos”. “Mira pedro, ese Mardo es un choro de marca mayor, los tramposos y corruptos de la IV república parecen de juguetes al lado de Richard Mardo, este tipo aparte de ladrón es un caradura, ojala vaya preso recalco” y allí terminamos la conversación telefónica.
Lamentablemente mi amigo tiene razón, la corrupción se ha hecho un estilo, un quehacer, un modo de vida dentro de la política. Y lo más lamentable es que salpica y hasta hace vida dentro del proceso revolucionario. El presidente Maduro ha sido muy claro al respecto, la lucha contra la corrupción y sus vicios se combatirán en todos los terrenos, dentro (PSUV y GPP) y fuera de casa (Oposición). De no ser así, los días del proceso bolivariano de cambio estarían contados. El morbo de la corrupción y el delito en filas revolucionarias, es lo más dañino que pueda existir. Es una especie de Cáncer, que acaba en poco tiempo con cualquier proceso emancipatorio.
En el país existe un cuadro y un ambiente de cambios radicales con respecto a la administración pública, existen buenos relevos para que puedan ser designados en cargos de envergadura. Todavía existen rezagos de la vieja cultura cuarto republicana de aquello de:” No me den, ponme donde haiga”. Esto definitivamente debe acabarse y con ellos, la Prebenda, El Clientelismo, Amiguismo, Nepotismo, Sectarismo, que son formas sutiles de corrupción administrativa.
En Venezuela, la cultura del “rentismo petrolero” ha hecho un gran daño a la sociedad misma. El dinero fácil conseguido sin ningún esfuerzo ha logrado formar a un grupo minoritario de la sociedad en cómplices. Aquella vieja conseja de que en: “Venezuela, había delitos pero no delincuentes” es una verdad del tamaño de un rascacielos.
La depuración debe existir en todos los entes administrativos, en los cuerpos de seguridad, de justicia, partidos políticos, ministerios y cargos legislativos etc. Es ahora o Nunca¡¡
La lucha es larga, por ello hay que aligerar la carga….. Venceremos