Hinterlaces reveló unas cifras que pusieron a pensar a mucha gente; mas, si aquellas se intercalan con recientes declaraciones del señor Capriles, gobernador de Miranda y ya sempiterno candidato presidencial opositor.
Según cifras de la encuestadora de hace una semana, por encima del 75 por ciento de los venezolanos repudia el método de lucha asumido por la ultraderecha encabezada por Leopoldo López y María Corina Machado. Pero Datanálisis, de Luis Vicente León, como para que no queden dudas, habló casi el mismo lenguaje. Es decir, aquellos actos, como guarimbas, los cables para degollar gente, sobre todo motorizados, la quema de escuelas, con niños y todo adentro, universidades, libros, bibliotecas enteras – como decir al detal y al mayor -, cazados por franco tiradores y paremos de contar porque con lo dicho basta, sin dejar de recordar que tales procedimientos arrojaron una grande cantidad de muertos, fueron repudiados por los venezolanos de manera apabullante. Circunstancia que ha obligado a Capriles, ahora mismo - ¡al fin!-, a reconocer que Hinterlaces y Datanálisis se quedaron cortos, pues según él, la cifra de rechazó alcanzó el 89 por ciento.
La semana anterior comentamos como al parecer Luis Vicente León, empezó a disputarle a otros, especialmente a Ramón Guillermo Aveledo, la jefatura de la MUD, atreviéndose a denunciar que aquellas formas de lucha no sólo habían sido repudiadas en la alta cifra que mencionó, sino que además habían favorecido la opinión popular frente al gobierno y particularmente la imagen del presidente Maduro que había subido y, tal como él mismo lo expresó, anclado en una sólida base del 42 por ciento.
Ante ese cuadro, peligroso para él, Capriles avivó sus neuronas y se atrevió a dar el paso que dio el de Datanálisis, quizás viendo peligrar su liderazgo. Por varios caminos se llegan a Roma se solía decir en nuestro tiempo; es decir no hay un solo camino, como dijo Primero Justicia, el partido de Capriles. Esto se hizo cierto en el caso de éste último, quien no se atrevía como todavía no se atreve Aveledo a romper con los violentos, y optó por dar un paso para distanciarse y declaró:
“El proyecto La Salida fue un fracaso. Quien perdió fue la oposición.”
Para hacerse aceptar por los opositores, aquellos que repudian la violencia y hasta los engañados inmersos en esta, agregó:
“El único beneficiado fue el oficialismo. La gente le teme al discurso opositor, creen que se quiere incendiar al país.”
Hablando de manera objetiva, sin apasionamientos, ni buscarle cuatro patas al gato, esta declaración pudiera ser una de guerra dentro del bando opositor y un catalizador para acelerar su ruptura; también la reconstrucción de la imagen del declarante ante la oposición ajena a la violencia y hasta sectores nacionales que tampoco están vinculados al chavismo, el cual sigue teniendo una enorme votación dura que comienza con ese contundente 42 por ciento a favor de Maduro.
Pero pudiera ir más allá. Como iniciar la recomposición de las relaciones y el rol de la MUD. Ramón Guillermo Aveledo ha jugado al oportunismo, al bailar como gallina en patio de bolas, entre las opiniones sensatas que sin duda hay en ese sector y los extremismos sin freno de Leopoldo López y María Corina Machado, quienes por los momentos parecieran no contar con el aval desmedido de quienes mueven los hilos más arriba. Por supuesto, en este análisis nuestro no entra Henrique Mendoza, quien ha sido señalado públicamente de estar manejando su propio proyecto aunque siguiendo la senda de los antes mencionado.
No hay duda, que habiendo sido Capriles dos o tres veces, la cifra exacta ya la olvidamos, candidato a presidente del bando opositor y sabiendo además que el paso que ha dado de denunciar como catastrófica la forma de lucha que les fue impuesta, no fue el resultado de su muy personal razonamiento, sino del cambio de actitud de los de más arriba, le coloca en posición de retomar el liderazgo que al parecer había perdido. Aun siendo así como pensamos, no dejamos de reconocer que pudiera haber un proceso regenerativo y comienzan a avivársele las neuromas.
Es importante, para valorar el paso que ha dado el gobernador de Miranda, la incompetencia de Ramón Guillermo Aveledo quien todavía deshoja las margaritas, tomar en cuenta lo que dicen las cifras, según las cuales, dentro del universo nacional, que incluye a todos los venezolanos, al valorar el liderazgo opositor el 43 % no reconoce a ninguno, el 24 % a Capriles y el 23 % a Leopoldo López. La cifra correspondiente a María Corina Machado es insignificante y Ramón Guillermo Aveledo no “aparece en las estadísticas”.
Estos números, también pudieron impulsar a Capriles –ayudarle a avivar sus neuronas – y reconociendo él mismo que el 89 % de los venezolanos repudió el proyecto “La Salida”, promovido por Leopoldo López y la Machado, ante la indecisión de Aveledo y el inesperado arranque de Luis Vicente León, a tomar esta inesperada decisión. Por supuesto, debemos dejar claro que hasta ahora había asumido la misma actitud vacilante del Coordinador de la MUD. Pero en todo caso, lo que cuenta es que intenta rescatar su liderazgo y para ello se ha deslindado al parecer con rudeza de sus anteriores aliados.
