Red Bolivariana

Contrabando y Listas del MP de Empresas de Maletín



El contrabando tiene siglos en el mundo entero. Está presente desde los tiempos “Mercantilistas” donde el beneficio económico era la guía para el saqueo de los pueblos. Piratas y Corsarios ingleses se hicieron famosos, contrabandeando mercancías que llevaban a sus reyes para beneplácito de las oligarquías europeas. Nuestra América no estuvo ajena de ese usufructo en tiempos del saqueo y genocidio por las potencias de turno. Millones de toneladas de nuestras riquezas fueron a parar a las arcas de las metrópolis colonialistas. Hoy existen diferentes modalidades de contrabando. Empezando por seres humanos, Órganos, Minerales, Especies Animales, Materiales y Alimentos. Venezuela ha sido atacada por este flagelo desde los tiempos de la IV república. El contrabando natural, el de extracción, el fraccionado y el mercado negro, ha hecho estragos en nuestra economía.

En tiempos de adecos y copeyanos era natural que Colombia nos vendiera carne de res, que pertenecían a los hatos y latifundios venezolanos que estaban cercanos a la frontera. Con la venia de intereses criollos y extranjeros estas reses desaparecían como por arte de magia y llegaban a nuestras mesas convertidas en bistec importado. Incluso, un Ministro de esa época, alego,.. “que como podíamos hacer si el ganado atravesaba la frontera en forma natural, ya que una res no conoce de fronteras y aduanas”… No solo era ganado que se nos iba por la frontera, sino; Oro, Diamante, Uranio, etc. Estos minerales eran extraídos por Garimpeiros en el estado Bolívar y Amazonas. El daño ecológico y también el genocidio de los venezolanos naturales de ese territorio fue denunciado muchas veces en tiempos de la IV. Que decir, de los millones de especies de aves, monos, tortugas, caimanes, jaguares y cualquier otra especie exuberante, que iban a parar a las jaulas de ricachones en Washington, así, como, las pieles de especímenes en peligro de extinción, que se convertían en zapatos, carteras y abrigos. Me contaba un amigo por allá en los años 80, que una Guacamaya Verde, costaba entre 5000 a 8000 $, viva o disecada, para se exhibida en las mansiones de lujo de los magnates capitalistas occidentales. La organización de la CIA, de carácter fundamentalista, denominada “Nuevas Tribus” e infiltrada en la selva venezolana realizaba muchas veces este tipo de tráfico de animales que al fin y al cabo es un contrabando de extracción. Llego el Comandante Chávez y mando a parar. Disminuyo la actividad ilegal minera de los Garimpeiros y las Nuevas Tribus fueron expulsadas de nuestro territorio.

Hoy Venezuela es sacudida con esta actividad, pero con designios diferentes. El contrabando de “extracción”, que también es un contrabando para el estado colombiano pero de otro tipo diríamos de “ingreso o de entrada”, ha perjudicado en grado superlativo la economía venezolana y también la colombiana pero en menor grado para Colombia sobre todo la de rubros alimenticios. Los 2 mil y tantos kilómetros de frontera siempre ha sido un dolor de cabeza para ambos países. Siempre se ha hablado de poblarla, pero solo ha quedado las palabras y las ideas, aun así, existe una gran cantidad de compatriotas de ambos países que viven en condiciones paupérrimas de subsistencia, que aunque, el problema es mayor del lado colombiano, también a Venezuela compete su solución a mediano plazo. La Revolución Bolivariana urge ser extrapolada a la frontera y convertirse en Revolución Permanente. Pero por supuesto, debemos primeramente combatir los carteles, mafias y mercado negro que con la venia de aduaneros, militares, policías y funcionarios administrativos gubernamentales hacen posible este ilícito fronterizo.

Este ilícito tiene sus responsables bien definidos, no hay que buscar chivos expiatorios. Desde los fabricantes venezolanos, los que empacan productos importados para el estado político, las diferentes alcabalas y aduanas, policías y militares que controlan el flujo y custodian nuestras fronteras, e allí donde debemos investigar y castigar. Lo demás es complementario. Repetimos; la frontera está en un abandono sistemático desde hace décadas, una población olvidada por ambos países. Que esta coyuntura, logre la unificación de voluntades desde los dos países, y busquen entre los dos gobiernos, la superación de la calidad de vida de quienes hacen ese territorio fronterizo su modus vivendi, ellos también merecen ayuda.

La lista del Ministerio Publico que ha sido anunciada por cuenta gotas de empresas que supuestamente han incurrido en ilícitos cambiarios, ya la habíamos conocido a través del Diario Ultimas Noticias. Este diario publicó a tres páginas si mal no recuerdo, una lista de empresas que deberían ponerse a derecho y llevar toda la documentación de los manejos de divisas recibidas. Algunas de ellas las conozco y doy fe que no son empresas de maletín. Son empresas con muchos años en el país, privadas nacionales y que han puesto su grano de arena en el crecimiento económico venezolano. Ojala ninguna esté incurso en delitos económicos. Lo cierto del caso, es que no son empresas de maletín, como han querido hacer ver algunos sectores.

Es importante esta acotación, ya que existen detrás de estas empresas patrimonios familiares desde hace varias décadas, esperemos como dije antes que no estén incurriendo en delitos, de ser cierto, lo lamento por ellas y sus dueños. Debería haber una clasificación de esta lista, colocar las que son reconocidas en el ámbito económico y las que si en verdad son de maletines.

Pensamos, que el defalco a la nación va más allá de estas listas

Cero Impunidad….… Llego la Hora… Venceremos¡¡¡


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Pedro Patiño

Químico, Investigador de Asuntos Económicos e Históricos, Analista Político, Eco socialista y Bolivariano.

 pedro2.patino@gmail.com      @pjph

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