La interrupción inteligente del golpe de Estado nos revela que la acción de los hombres modifica el curso de la historia. Con ello el Estado ratifica lo que el pueblo ha sufrido, sostenido y denunciado constantemente: hay diferencias entre imperialistas, oligarcas y, el pueblo.
Y esto no es casual, dado que cuando el pueblo comienza a producir sus medios de vida, un determinado modo de vida que incluye poder político, salud, educación, vivienda, trabajo, paz y tranquilidad accesible a las masas que fueron anteriormente empobrecidas y marginadas, las relaciones sociales entre los individuos se transforman.
Es decir que cuando la producción, la estructura social y el Estado coinciden, brota un modo particular en que los hombres y mujeres manifiestan su vida. Este modo de vivir presenta las relaciones sociales como lo que son, no como se quieren imaginar o presentar ideológicamente.
Las reacciones inmediatas que emanan de la interrupción del golpe de Estado, nos ha puesto de nuevo en la cabeza, que las cosas que transformó el pueblo junto a Chávez (el poder político, la estructura militar, la reforma agraria, la nacionalización del 60% de la producción petrolífera, de la electricidad,la ampliación de la educación superior y el desarrollo científico-tecnológico, el conjunto de misiones y la estatización de muchas empresas norteamericanas y europeas)están en peligro de ser revertidas y, que si no se defienden prácticamente, todo volverá a ser de nuevo capitalismo.
No se trata de estar alerta, sino de saber que esto no ha terminado y de manifestarse por el socialismo, en una gran marcha nacional en Caracas y en todos los lugares del país.
El socialismo sigue, que gran oportunidad para los que se desvían, ahora es el momento de volver a Chávez y al socialismo.