Un importante y muy publicitado medio de comunicación impreso y también Aporrea, destacan como algo trascendente y hasta más que eso, que "Manuel Rosales retorna".
Ya uno lo imagina, por lo tozudo, recitando como Pérez Bonalde, "Vuelta a la patria".
Cada vez que sale el nombre de Manuel Rosales, uno no piensa en un político, aunque de poca significación, un ejemplar de aquella especie que con un paquetico de palabras de uso común y otro más pequeño de rebuscadas, como Luis Piñerúa, sino en alguien que nos desternilla de risa; pues su sólo nombre para eso basta. No es aquel comediante excepcional que fue Cantinflas, quien llevó a la pantalla grande al peladito mejicano que tiene mucho de Quijote y sólo en apariencia dice disparates y quien también soñó "¡Si yo fuera diputado", sino en un político de baja estirpe que hasta candidato presidencial fue, quien si dice disparates a granel sin enterarse nunca. Claro, a alguien se le ocurrirá decir "cuántos lo han sido", pero Rosales no tiene parangón. Como solía decir mi tía, "no es que fulano sea ignorante, sino que abusa".
Haber escuchado a Rosales mencionar a Voltaire y ubicarle en el tiempo antes de Cristo, es la mayor torpeza y mayor muestra de ignorancia que uno haya percibido en la vida. Es posible que Rosales, en alguna oportunidad, al azar, escuchara el nombre de aquella figura importante de la Ilustración pero nunca supo quién fue. Claro, en la vieja escuela adeca de la cual formó parte aprendió a aderezar sus discursos con palabras rebuscadas, refranes aplicados sin concierto y hasta expresiones de uso común pero que el pobre citaba mochas o deformes como aquello "del canto de ballena". Por eso repito, uno le imagina, habiéndose aprendido parte del poema, por indicación de alguien, si fuese por él no lo haría, pues que va saber Rosales de aquel poeta lírico caraqueño:
"¡Tierra!, grita en la proa el navegante
y confusa y distante
una línea indecisa
entre brumas y ondas se divisa."
Pudiera decir aquello poniendo su sonrisa triste, mientras el avión empieza a sacar el tren de aterrizaje.
Dije pobre para calificar a Rosales, lo que me obliga a una necesaria aclaratoria. Se dice que es muy rico materialmente hablando y debe serlo. Es un "criador" ganadero que logró, no sabemos por cual medio, que sus vacas pariesen cuatro y cinco veces más de lo normal. No sólo que pariesen más que las otras en un solo parto sino que lo hiciesen al año tantas veces como él lo decidiese. Sus vecinos se extrañaban como su manada aumentaba aceleradamente mientras las de ellos se achicaban.
Junto a la información de su regreso, una compañera suya de UNT, dice dramáticamente "Manuel regresa a enfrentar lo que sea". Es decir, el mismo hombre que partió apresurado apenas escuchó rumores ha recapacitado, recuperado la cordura y, en actitud valiente, viene a enfrentarse a la justicia. Eso sí, su compañera, sin siquiera saber los cargos contra Rosales, ya de antemano asegura que está libre de culpas. Cosa curiosa, también manifiesta que aquél salió del país porque se le intentaba detener y hasta enjuiciar "por emitir opiniones contra el gobierno". La misma historia del otro, se le enjuicia o pretende enjuiciar, por ejercer su derecho a opinar. Le faltó poco para calificar esas opiniones de sabias; no obstante aseguró que su presencia en Venezuela les garantizará el triunfo en las elecciones del 6D, con lo que casi dijo aquello. Su palabra sabia cambiará las tendencias y hasta sacará a su partido de la cuneta en la que está hundido. A menos que proyecten que Rosales, así como hace parir las vacas terneros y terneras en hileras, pudiera también hacer que el método funcione en las urnas electorales a favor de UNT.
Días atrás un diario de New York comparó a Leopoldo López con Mandela, como si el sólo estar preso fuese suficiente para eso. Pero es más, le publicaron un artículo en el cual habla de estar encerrado bajo condiciones infrahumanas. Claro, sirve para intentar semejarle al líder surafricano, como si eso bastase; aparte que la historia es otra. Los cargos contra López nada tienen que ver con sus opiniones y las condiciones del sitio donde se encuentra detenido, según otras fuentes, lejos están de ser como el las describe. Pero en todo caso, lo que importa es mostrar cómo se intenta asemejarlo a Mandela.
Estando así las cosas, el partido en las ruinas, conviene entonces convertir a Rosales en un mártir o un héroe. Lo más probable es que el jefe de lo poco que queda en UNT, ya esté avisado que, por alguna circunstancia previsible, llegará por el aeropuerto de Maiquetía, no por el puerto de La Guaira, lo que no le impedirá recitar "Vuelta a la Patria", y allí le estarán esperando sus pocos compañeros y alguien de la MUD, pero nadie con intención de arrestarle. Si esto sucede, que es lo más probable, como resultado de algunos acuerdos previos o porque no hay razón alguna para eso, sus compañeros le presentarán como el heroico personaje que se atrevió a desafiar al rrrregimennn, entrando como perro por su casa. Además, le ayudarán con una inventada historia de privaciones en el exterior, tanto que debió trabajar "como un negro". Por cierto, pregunta uno, ¿Rosales habrá aprovechado el tiempo para estudiar? Ojalá, es lo mejor que pudiera haber hecho.
Si le detienen porque hay orden de captura dictada por algún tribunal, lo que no es descartable, harían de Rosales otro Mandela. Así la oposición ya no tendría uno, sino dos y otro motivo para arreciar sus discrepancias. Aun cuando cuesta creer que regrese tranquilamente si sospecha que pudieran aplicarle una condena que le evite seguir multiplicando velozmente su manada. ¡A lo mejor, piensa uno, hay un arreglo! Pero su gente no quiere desperdiciar la oportunidad que un diario gringo le mencione como el otro Mandela de Venezuela. Así, a Rosales y a UNT, le suben las encuestas; falta les hace pues van "cuesta abajo y en la rodada".
No son las "Vidas Paralelas" de Plutarco.