Parece ser vox populi que el suegro de Ramos Allup podría acceder de inmediato a un contrato para retocar las oficinas de la Asamblea Nacional y etc entre otras cuestiones.
Ya en la IV, el referido sujeto habría hecho fortuna de la mano de Ramos Allup, quien a cambio, obvio, entre Gonzalo Barrios y una decorosa alternativa, no vaciló reivindicarse en algo, y con un suegro agallúo, mejor pa´el perro cuando la perra es tocucha, he ahí el quid de la cuestión, billete, billete, billete y billete.
¡Adios, Gonzalo Barrios, dulce mecenas! -pudo decir el tipo- me voy por la tarde linda / recordando a esta mulata / un soplo de brisa ingrata / de la copla se me guinda / …
Ramos Allup, nada escrupuloso, a menos que lo demuestre, es también, la ficha exacta del imperio para cogerse el petróleo de la Faja del Orinoco, ese es el tipo de fulanos a los que el feroz enemigo apela, claro, si no tienen defensa pública entonces el imperio les lee la cartilla y les dice así: mira, tú eres esto y aquello, si no haces lo que te decimos entonces vamos a publicar lo que eres; y así funciona el chantaje, entonces, helo ahí a Ramos Allup y a su Gonzalo Barrios.
Pero, ahí está el pueblo, alerta, moscapil.