Pasar de un estado de cosas a otro, hasta diametralmente opuesto es muy riesgoso. Suelen producirse traumas. Como por ejemplo los relativos a la altura y temperatura; cambios bruscos de condiciones pudieran provocar angustia, rabia, rechazo y por supuesto hasta la muerte. Un grupo, familia y un individuo que violentamente pasan de la bonanza a la ruina, son objeto de un impacto tan singular y contundente que pudiera hasta llevarles al suicidio. Se dice que la llamada gran crisis o depresión del capitalismo, rebasada la segunda década del siglo veinte, dio entre otros resultados unos cuantos suicidios. Varios que habían sido multimillonarios hasta ese momento, se lanzaron al vacío desde edificios muy altos, por haber quedado en el "pele".
Los "saltos" en política suelen ser incomprendidos. Los terceros que por ellos se sienten afectados, sobre todo amigos y compañeros del saltarín, con quienes se ha compartido ideas, sueños y hasta el enfrentarse al contrario, reaccionan con dolor y hasta rabia. Porque no comprenden aquél se haya ido sin comunicarse con los suyos. Pese a lo que suele decir un amigo, "los cachos si duelen". Por eso, casi inmediatamente, se acusa al saltimbanqui, por lo menos de traidor.
Borges, Ramos Allup y Florido, representantes de los grupos más influyentes en la MUD, explican con un jocoso galimatías, su posición frente a lo que los convocantes como el Papa, el presidente de República Dominicana. Rodríguez Zapatero y uno de los convocados, el gobierno, llaman diálogo que, según el diccionario, que es Real, de la Academia Española, como a los primeros les agrada, llama "Plática entre dos personas, que alternativamente manifiestan sus ideas" y además "Discusión o trato en busca de avenencia". Las dos personas que dialogan, en este caso, tendrían sentido grupal o colectivo en cuanto a solidaridad con las mismas ideas o propósitos, por un lado el gobierno y del otro la oposición.
Pero ese diálogo que se inició en Santo Domingo es negado por la MUD, pues ellos dicen que no hubo y no hay. Ramos Allup, quien responde por su persona, alega que no estuvo allí y que no habla con Maduro desde la instalación de la AN por él presidida. Entonces como él no estuvo en el país antillano en aquella reunión por demás conocida, ella no se produjo, pese hayan estado sus representantes o delegados y lo dicho por el presidente anfitrión. O lo que es lo mismo, no se asume responsable por aquella reunión como tampoco por lo acordado.
Borges y Luis Florido, voceros de los sectores más radicales y por ello ganados para formas de lucha ajenas a lo constitucional y en consecuencia, de hecho poco dados para el diálogo, quienes no pueden darse el lujo del adeco de decir no haber estado allí, hablan que en el país antillano sólo hubo "ejercicios exploratorios".
La conducta de estos últimos se explica precisamente por lo que implica pasar violentamente del estado de congelación al inicio del de evaporación, de la altura del altiplano boliviano al nivel del mar. Pasar de la consigna o mejor de la ejecución de la consigna de lucha armada al diálogo, como quien se cambia de camisa, es un riesgo de infarto. Un hueso duro de roer y un cambio muy difícil para que sus "simpatizantes", como les llaman ellos, puedan asimilar con facilidad y prontitud. Además, no hay duda que la elección constituyente, los dejó con los crespos hechos y fuera de balance. No la pudieron impedir, pese que ofrecieron eso a sus fuerzas por demás beligerantes y para mayores males para ellos, se produjo una avalancha de votos que los dejó sorprendidos. Ocho millones de venezolanos, un significativo porcentaje del padrón electoral, condenó sus prácticas. Para más calamidades, bien sabían que ya casi nadie atendía a sus llamados de marchas "pacíficas" y se estaban quedando solos con los violentos, muchos de ellos simples mercenarios.
¿Cómo explicar convincentemente a los violentos, activos o en la retaguardia, un cambio de planes, como el de pasarse a la lucha electoral y hasta entrar en diálogo, como en condiciones desfavorables, si comparamos con un pasado no muy lejano y un discurso triunfalista? Además, esos violentos, jefes y líderes en aquellas circunstancias, que aparecen inesperadamente, son hijos de ellas, suelen no ser aptos para desempeñarse en condiciones diferentes y eso genera descontento. Es como sacarlos de su caldo de cultivo.
¿Cómo asimilar los nuevos planes sin haber discutido nada de eso, sino pasarse al plano donde el adversario, el gobierno, invita a combatir? ¿Cómo entrar en diálogo, así como así, de igual a igual, en el mejor de los casos, de repente, con alguien a quien se lo vendieron derrotado, por lo menos así se lo hicieron creer los dirigentes y tanto como enemigo irreconciliable?
Difícil tarea. Por eso Borges y Florido apelan al galimatías o "lenguaje oscuro por la impropiedad de la frase o por confusión de las ideas", según el cual, esas reuniones no son un diálogo sino "ejercicios exploratorios". Como que estuvieron en Santo Domingo, todo el mundo lo sabe y no pueden poner por mentiroso al presidente que les invitó y recibió cordialmente, y es más llegaron a acuerdos, es decir hubo avenencia, de lo que todo el mundo sabe, pero optan por esa calistenia verbal para engañar a los suyos, no teniendo un discurso pertinente para explicar tanta insensatez. Y si algo hay de sensato es participar en las elecciones y diálogo pero ¿cómo bajar tan pronto a aquellos a quienes subieron a lo alto de las montañas?
Ahora el asunto se les ha vuelto más angustioso y poco propicio ese "lenguaje oscuro", para convencer a los suyos que se negaron a votar en las primarias. Borges y Florido, de PJ y VP, de cuerpo presente en Santo Domingo, quienes salieron con las tablas en la cabeza en ese ejercicio electoral, pues su "simpatizantes" todavía no han digerido el cambio, solo se les ocurre ese galimatías con el que además parecieran juzgar de inmaduros, por decir lo menos, a los suyos. ¿Cómo convencer a alguien, por demás radicalizado a causa de mi propio discurso, que debe dar un giro de 180 grados con frase tan enredada y hasta pueril o mejor galimatías como la llamaría el diccionario?
Ramos Allup, los vino observando desde hace tiempo; el viejo zorro sabe bien por dónde salta la liebre y cuándo llegaría el momento de mover sus piezas dentro de la MUD, el cual llegaría cuando sus contrincantes en ella, se hubiesen agotado por aquel inútil esfuerzo; sin duda estudió bien el panorama y fijó su estrategia, cual experimentado cazador; sabía los agarraría en la bajadita, hasta descalificados ante los suyos. Cuando el CNE llamó a elecciones a gobernador, sin consultar en la MUD, hasta como retando a los demás, declaró que los suyos irían a esa contienda contra viento y marea. Además, es obvio, se había cuidado de dejarse envolver en las guarimbas o la guerra de días atrás, por lo menos en plan de líder; digamos que se mantuvo en la sombra por sí acaso. También se cuidó de aparecer en Santo Domingo, aunque se sabe bien que es de quienes están por el diálogo. Pero como no estuvo de cuerpo presente, dice que allí no estuvo y que por ahora ese diálogo es extemporáneo, tal como lo dijo también el Cardenal, quien pareció fijar la línea extrema.
Con esa jugada, el adeco, quien le ganó las elecciones primarias de la MUD a los partidos radicales, que aparecen envueltos en un diálogo que no quieren, por lo que perdieron por los momentos el respaldo de los suyos, busca atraer los "simpatizantes" descontentos para que voten por sus candidatos a gobernadores, por lo menos los de AD.
¡Perro viejo late "echao"! A Borges, Florido, López y a un montón, Ramos Allup se los metió en el bolsillo y parece haberlos ensartado con una puya de raya o mejor "les metió medio chuzo "guarisney".
