Era previsible que a los candidatos opositores les pegara la altura y empezaran a inventar excusas como que si "Maduro me miró mal", que si el pato y que si la guacharaca y que si patatín y que si patatán, ¡puro gamelote, compadre, comadrita, puro buchipluma!
Uno, Falcón -y al que ahora le dicen Faltrump-, se largó con una de embustes, que si los medios de comunicación no le dan cobertura a su campaña y demás sandeces, a lo que Rodríguez retrucó presto y lo sentó de culo, lo instó a que mostrase las pruebas pero aquél se hizo el mogollón y corrió con el rabo entre las piernas hasta dar con un arbusto encima del cual levantó su patica.
Otro candidato de la misma pedigrí y, por cierto, muy conocido por su implicación en el feo y perverso asunto de los llamados "the white papers de Panamá" y otras trampas dedicadas a la estafa internacional, habría afirmado haber hablado con los ique "americanos" para que viniesen a hacerle a Venezuela un bombardeo humanitario; mas, al verse en cueros la emprendió a llorar también.
Es decir, que al percatarse ambos de que sus debilidades están a la intemperie, optaron instados seguramente por sus amos, a unirse; pero la suma de dos debilidades, en este caso lo que da es una debilidad mayor; de fortalezas entrambos yo te aviso chirulí.
Al parecer el referido otro sujeto dio a entender que americano es el del norte porque si a ver vamos yo también soy americano y él no ha hablado conmigo para haber formulado esa aseveración absurda, lo que me da pie para calificarlo de hombre de hablar aguao y, peor, puesto que al proferir tal necedad revela su falta de identidad y quien pierde su identidad también pierde su autonomía, luego, ¿con qué careta puede ese tipo aspirar a ser presidente, no es acaso eso una animalada?
De todo esto me percaté en denante pero de ipso facto pensé como el rayo que esos dos sujetos son como dos matemáticos idiotas porque ni siquiera saben lo más elemental de la aritmética, sumar.