En los primeros días de octubre, tuve la oportunidad de tropezarme en el aeropuerto de Maiquetía con el gato Pérez y entre chanzas, preguntas y respuestas capciosas de bando y bando, atiné a preguntarle a este viejo amigo desde los tiempos de nuestra militancia en la Juventud Comunista: ¿Ajá gato y a este nivel del combate, aquí entre nos, en que punto, para ustedes está la candidatura de Rosales? El gato Pérez de forma presurosa, porque lo dejaba el avión que los trasladaría a preparar un acto allá en Margarita, me lanzó un fogonazo por las patas: yo reconozco que todavía estamos en el 15%, pero si a mediados de Noviembre llegamos al 30, o 35% vamos a hacerles pasar las de Caín al loco de Chávez.
En el Post Grado de Economía de LUZ, todos los sábados mantengo conversación con un experto en materia de sondeos de opinión y quien actualmente dirige una empresa contratada por el comando Rosales, y ante una pregunta parecida a la del gato Pérez, este experto catedrático me dateaba, sin alardear de información sumaria, que en sus trabajos estadísticos, actualmente la diferencia estaba en el orden del 15% a favor del presidente Chávez, aunque aquí en el Zulia según sus trabajo, Manuel le está ganando al Presidente.
José Hernández, es un joven Sociólogo y profesor de los programas educativo de Manuel Rosales en una universidad privada de la región, con quien acabo de compartir la culminación de una Maestría en Desarrollo Social. Este compañero de estudio y furibundo activista de las huestes de Rosales, con el fervor e ingenuidad que le da su recién estrenado activismo, me lanzó por el pecho la verdad verdadera del núcleo duro del rosalismo: “Mirá Douglas, nosotros reconoceremos los resultados del CNE, solo y solo si, si anuncia que Manuel ganó, porque lo otro sería un fraude”.
Estas distintas expresiones en distintos escenario, demuestran que “hay mucha agua debajo de las hojas”, como diría el camarada Douglas Bravo. Que cuando Manuel vuelve amenazar con el quítame esta pajita de las capta huellas y el cuento de las condiciones, está repitiendo la misma lógica de mis amigos escuálidos; solo que sin darse cuenta, revela el color de esas aguas revueltas en los predios de ese comando de campaña.
Ya no hay tiempo, quedan dos domingos de campaña y esto lo sabe el comando de Rosales, inclusos los recién llegados como Oswaldo, Ledezma y el jefe de la última resistencia abstencionista, el inefable Oscar Pérez. Todos ellos, incluyendo al mismísimo Candidato saben de esa dura realidad: Chávez les ganó la partida y no se atreven a reconocerlo, esperamos que no se atrevan a sabotear el acto electoral y las fiestas decembrinas de los venezolanos, que como el color de la navidad será verde y roja rojita.
Douglas.zabala@hotmail.com
