"La verdad es como el sol.
Lo hace ver todo y no se deja mirar"
Víctor Hugo
El martes en la tarde llamé a un amigo, para preguntarle, si había leído el artículo del economista Rodrigo Cabezas (VENEZUELA: EL SONIDO DEL SILENCIO DE LAS VÍCTIMAS O LA COARTADA ANTIMPERIALISTA DE LOS VICTIMARIOS) * rápido me respondió con una risita, el cual no me dio chance para seguir escudriñando la opinión de una persona, con muchos años trajinando al lado de la izquierda: "A mis años –79– tengo que seleccionar lo que voy a leer, y de este señor menos, después de verlo al lado de Guaidó, de lo más tranquilo, sin importarle el tiempo en el gobierno de Chávez. A mí nadie me lo contó, lo vi pasar frente a mi hogar en una manifestación, como cualquier adolescente sin conciencia, de los tantos adinerados, que formaron parte de las guarimbas con él"
El plural de la palabra cabeza, es cabezas, pero Rodrigo, cuando emite sus opiniones escribiendo no utiliza, ni siquiera la que lo identifica y lo diferencia de los demás mortales y pensantes, porque me atrevo asegurar es el más ingenuo de la jauría, a la hora de enfilar baterías contra el valiente Nicolás Maduro. Muchos de ellos utilizan el idioma con cierta dulzura –en algunos casos– dejando escapar algo de humanidad, después de haber descargado toneladas de odio, semejantes a una manada de lobos hambrientos, cuando enseñan sus afilados dientes amenazando a su perseguido; la muestra más convincente: Javier Antonio Vivas Santana, en su artículo aprovechando el día del amor y la amistad.
El profesor de economía Rodrigo Cabezas, pidió la palabra para terminar repitiendo el mismo discurso con algunas verdades, falsas noticias o –fake news –y varios adefesios, que nadie se los cree, ni siquiera en una reunión pasada por licor, haciéndome recordar algunas anécdotas de Juan Vicente Gómez, cuando le dictaba a su secretario, y en una oportunidad este escribiente le dijo con la voz muy callada: "Mi general, el hombre que tenemos preso, y usted siempre pregunta por las dudas, no es enemigo nuestro, al contrario es amigo nuestro" se paró enseguida con la voz de mando y la socarronería por delante para decirle ¡Déjenlo ahí, tú crees que después de ocho años preso, va salir amigo nuestro!
El profesor Cabezas, en su largo escrito, no toca para nada al despedido ex presidente estadounidense Donald Trump, y menos a Guaidó, parece que no existen; dijera un amigo ¡dile pendejo por eso! En un corto párrafo hace el siguiente señalamiento: "El discurso oficial al comienzo de la recesión, hace siete años, justificó tal desastre en la "guerra económica"; posteriormente, con las sanciones impuestas por los norteamericanos, con impacto desde 2018, se mudaron a esta excusa. La verdad es que estas últimas profundizaron la crisis pero no la originaron. El 80% de los venezolanos no cree esa narrativa" No, está por demás repetirle, que no son los norteamericanos, ni siquiera los estadounidenses; fue el gobierno de Trump, y sus títeres ampliamente conocidos, y uno de ellos terminó echándole la partida para atrás con un libro, donde deja al descubierto todos los procedimientos en la tortura.
En otra parte de su extenso pedimento de palabra, deja caer esta infantilidad, porque no se puede llamar de otra manera, cuando vemos en un escrito de un economista, quien además cumple una actividad orientadora, como docente: "¿Por qué esta élite condena a Venezuela a no tener periódicos impresos? ¿A una autocensura humillante de los medios de comunicación e información? Pregunto, por qué no dice, que al gobierno le han trancado la entrada de alimentos y medicinas y por lógica se ha presentado desabastecimiento y no podemos esperar papel para imprimir, cuando la tecnología viene desplazando esa manera de comunicación, y además la prioridad es la comida; pero yendo al fondo del problema en esa acción criminal por sacar al gobierno de Maduro, a costa de lo que fuera, muchos de esos empresarios se han "autosuicidados" como en una oportunidad de manera muy folklórica expresó Carlos Andrés Pérez, y se han ido a la quiebra. La otra verdad inocultable, por qué han cerrado más de mil periódicos en los Estados Unidos, y esto no aparece en su escrito.
El cinismo de este señor sin "cabeza", me asombra, cuando hace referencia a la siguiente pregunta, que le han formulado y a manera de justificación la señala: "Me he preguntado por qué países sancionados o bloqueados económicamente como Cuba, Irán y Corea del Norte no han tenido hiperinflación o desnutrición infantil. Me he preguntado porque Irán sigue en su nivel promedio de producción de crudo y gasolina y su sector privado no petrolero exportó más de 18 mil millones de dólares en bienes y servicios en 2020" Profesor, como usted no dio la respuesta, aquí la tiene: En Cuba, llegaron por la vía de las armas, y el primer objetivo fue crear consciencia, y ahí están batallando contra todos los crímenes lanzados por los gobiernos gringos; al gobierno de Corea del Norte, cuando lo amenazan, responde sin miedo, pero están sufriendo las consecuencias del bloqueo, según palabras del propio presidente; y en Irán, hace rato echaron en las aguas del estratégico estrecho de Ormuz la tecnología de la industria petrolera, que los tenía atados al poderoso país imperial: EUA, y por eso estamos recibiendo la ayuda de tan lejos, paliando en algo el bloqueo contra Venezuela.
Estimado profesor, lo único que nos ayuda en este mundo tan lleno de injusticias, y con el imperialismo metido en un conflicto, que muchos no se imaginaban, hasta hace poco, es hablar con la verdad. Estamos claro, que el gobierno ha cometido una cantidad de errores voluntarios e involuntarios, pero nadie puede echar al cesto de la basura, el informe de la relatora de la ONU, Alena Douhan, cuando de manera muy precisa deja al descubierto el criminal bloqueo del imperialismo de la mano de Donald Trump, y el último programado títere de la oposición venezolana el autoproclamado Guaaaaaaaa–ido. Espero lea el informe, para ver, si, en algún momento lo puedo leer nuevamente con parte de la verdad del ataque sistemático contra el presidente Nicolás Maduro.
